“El libro Rojo es una constatación de reflexión profunda”

“El libro Rojo es una constatación de reflexión profunda”

El autor de El libro Rojo de Jung. Claves Para La Comprensión De Una Obra Inexplicable habla sobre una de las obras más misteriosas del siglo XX, que permaneció inédita por décadas y que fue publicada recién en 2009.

VISIONES Y REFLEXIONES SOBRE JUNG. Bernardo Nante recopila las partes de la obra del pionero del psicoanálisis. VISIONES Y REFLEXIONES SOBRE JUNG. Bernardo Nante recopila las partes de la obra del pionero del psicoanálisis.
04 Febrero 2018

De Alejandra Crespín Argañaraz y Gustavo Dante.- 

- ¿Qué es El Libro Rojo de Jung?

- El Libro Rojo De Jung narra las visiones que Jung tuvo, desde noviembre (hay alguna mención de octubre) de 1913 hasta 1926. Son visiones, algunos sueños, la experiencia que él tuvo, de tipo arquetípica, simbólica y El Libro Rojo las consigna pero al mismo tiempo hace un trabajo de instrumentación, o sea, trata de comprender esas visiones. Este libro fue un libro íntimo que posteriormente dio la base de su obra teórica. Jung, primero consignó esto en unos cuadernos de tapas negras -se los llaman Libros Negros- que todavía no han sido publicados y después lo trasladó a un libro, que encargó, de grandes proporciones, de madera, cubierto en cuero rojo, y allí fue trasladando el texto en letra gótica y al mismo tiempo fue reelaborando con imágenes y reflexiones esas visiones. Lo fue haciendo, en las noches, desde 1914 hasta 1930. El Libro Rojo está dividido en dos o tres partes, según como lo veamos: “Liber Primus”, “Liber Secundus” y la tercera parte, que no llegó a pasarla de los Libros Negros al Libro Rojo, pero en la edición que hemos hecho están incluidas las tres partes. Cada parte está dividida en capítulos y cada capítulo incluye las visiones y luego esta reflexión, que a veces es conceptual, a veces poética, a veces está como razonando, otras veces sintiéndose casi tomado por ese entusiasmo que transmiten esas visiones, que fueron muy impactantes y que lo conectaron con la profundidad de la Psique.

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-¿ Y entonces cómo llega a relacionar Jung la psique?

- Ubiquémonos en el pensamiento y en la psicología contemporánea, esto es una experiencia personal que excede lo meramente científico, no obstante esto ocurre cuando Jung tiene 48 años, ya era un científico muy reconocido, incluso por sus estudios experimentales, antes de Freud, el puntal de este libro comienza cuando se separa de Freud (12/13); pero a fines del Siglo XIX, claramente, se establecen las bases de una psicología científica empírica,es decir, una psicología que no se ocupa de la psique, que no concibe la psique como una estructura autónoma humana sino, simplemente, lo psíquico pasa a ser un fenómeno que se puede concertar empíricamente hasta cierto punto, pero que probablemente (eso ya era materia de discusión en esa época) sea un epifenómeno de cuestiones físico químicas.

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- ¿Puede explicarnos acerca del epifenómeno de cuestiones físico-químicas?

- Si eso ocurriera, ya no podemos hablar de psique. Si yo sostengo que la psique no es más que un epifenómeno de un proceso físico-químico, no podemos hablar en un sentido estricto, de una psique. Justamente Jung, hace un movimiento inverso. Lo que él advierte es que estas visiones, que son significativas, autónomas, que no son creadas por el yo, que provienen de modo autónomo del inconsciente, que son portadoras de sentido, que traen novedad y creatividad, lo que muestran es que uno podría recuperar empíricamente un concepto de autonomía de lo psíquico, como si fuera independiente del yo y que tiene cualidades que no pueden ser explicadas por un modelo cientificista. Si yo advierto que hay una creatividad, una potencia espiritual en la psique, que se presenta a través del nuevo simbolismo, que es autónoma, construye un sentido que excede mi capacidad “yoica” y mi construcción teórica o científica, entonces podría ser aceptable recuperar en un concepto ampliado de ciencia el concepto de la psique. El libro Rojo no es un libro teórico que se ocupa de esto, sino que es una constatación de reflexión profunda, pero que no llega a ser científica, aunque él dice “esto fue un experimento científico”, pero lo que quiere decir, es que no es un producto de la fe, o sea que no es una especie de apuesta religiosa.

- ¿ No tiene nada que ver con las religiones?

- Tiene que ver con una dimensión humana, que es espiritual y que uno podría decir en sentido amplio religiosa, pero no tiene que ver con la aceptación un credo o una creencia previa, sino con una experiencia de profundidad, que en última instancia es una experiencia religiosa, en el sentido de una observancia cuidadosa de la profundidad que me conecta con un sentido único.

- Comentaba una de las experiencias o sueños que había tenido Jung y que tenía gran importancia, el Libro de Kempis (Imitación De Cristo). ¿Eso fue verdad o un sueño?

- Es interesante la pregunta “ si es verdad” porque para Jung es verdad, aunque una verdad diferente a la realidad física, porque para Jung la vida psíquica es verdadera. Aclaremos, que todo lo que está contenido en el Libro Rojo no tiene que ver con la realidad física, sino que tiene que ver con sueños o visiones. Respecto del Libro de Thomás de Kempis, que tiene que ver con una devoción en la que se remarca fuertemente la relación íntima del creyente cristiano con Dios, ese texto, aparece mencionado en el Libro Rojo, particularmente en los capítulos XIV y XV del “Liber Secundus”. El libro Rojo aclara que ya en estos tiempos debiéramos más que seguir a Cristo, ser Cristo, no en el sentido del Salvador, sino en el sentido de que la figura espiritual del que debe seguirse está en última instancia, en potencia, en la integridad. Esto parece contraponerse a lo que aparece en el capítulo XIV. El Capitulo XIV comienza con una visión: (Aclaremos que los personajes que aparecen son otra parte de uno, aspectos de su propia profundidad, que deben ser integrados) Jung se encuentra en una biblioteca con un bibliotecario, un intelectual contemporáneo, alguien separado de la religión; Jung le pide al bibliotecario el “Libro de Kempis, La Imitación De Cristo”. El bibliotecario le da el libro y le manifiesta su sorpresa, ya que sabe que Jung es un intelectual, a lo que Jung le da a entender que en cierto momento la ciencia nos deja vacíos, que necesitamos algo más; entonces el bibliotecario le señala que también contamos con libros devocionales y le menciona El Fausto, de Goethe y Zaratustra, de Nietzche, a lo que Jung le responde: Pero estos libros tienen que ver con quien busca más libertad, como diciendo “el hombre no sólo necesita más libertad, necesita también en algún punto una sumisión, sentir que está contenido, ya que de alguna manera está huérfano”.

- ¿Hace referencia a un Dios Superior?

- Hace referencia a lo sagrado. Ya con el libro (Capítulo XV) Jung va a la cocina y se encuentra con la cocinera, quien a diferencia del bibliotecario es una mujer muy sencilla, modesta, que conoce este libro devocional porque su madre se lo había pasado y ocurre que con la cocinera se entiende un poco más, a pesar de que ella también se sorprende de que Jung, con sus condiciones sociales y culturales lea este libro. Luego, mientras Jung está leyendo el libro se queda dormido y hay un sueño dentro de la visión. En ese sueño ve a una persona un poco trastornada, un anabaptista (que es una corriente con tendencias fundamentalistas, de los Países Bajos y en otras partes de Europa), y este anabaptista quiere ir a Tierra Santa. En ese momento es evidente que hay una suerte de disfunción psíquica y lo internan en un psiquiátrico (aclaremos que esto no es que ocurrió físicamente, sino que esto está dentro del sueño de una visión de Jung). Lo interesante es cómo desemboca esto, se produce un diálogo desopilante. Los psiquiatras que lo entrevistan, lo ven con el libro de Tomás de Kempis y le dicen: ese libro Hoy lleva al manicomio. Es que el reduccionismo psiquiátrico es heredero del reduccionismo intelectual, que ve lo religioso como algo alejado de la realidad o patológico. Jung dice: “Oigo voces” y los psiquiatras responden: “paranoia religiosa”, a lo que Jung acota: “Pero no es que las voces no vienen a mí, sino que yo voy a las voces, es el método intuitivo” (en el libro de Thomas de Kempis, hay alusión al método intuitivo, que consiste ir hacia la oportunidad de la psique). Entonces le dicen: Ah…Neologismo. Ahí lo que se ve claramente es la necesidad que tiene la psique, de crear una suerte de síntesis entre ciencia y religión.

Perfil

Bernardo Nante Es doctor en filosofía y realizó estudios superiores en psicología, ciencias orientales, matemática y economía. Es profesor en diversas universidades e instituciones de educación superior. Investiga sobre la interrelación entre psicología, religión y filosofía comparada Oriente-Occidente. Preside la Fundación Vocación Humana. Se especializa en las fuentes de la obra de Jung. Tuvo a cargo la edición castellana de C.G. Jung, El libro rojo. Es autor de El libro rojo de Jung: Claves para la comprensión de una obra inexplicable, Buenos (Ed. Siruela, Madrid).

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