El Gobierno anunció que pagarán deudas y actualizarán jubilaciones

El Gobierno anunció que pagarán deudas y actualizarán jubilaciones

El presidente dijo que abonará los juicios y dará aumentos de hasta el 45% a quienes desistan de la vía judicial y a los jubilados que aún no fueron a la Justicia. Es un total de 2,5 millones de personas.

EL ANUNCIO. Macri habló del proyecto de ley ante funcionarios de su gabinete y miembros de un centro de jubilados ubicado en cercanías de la Casa Rosada. dyn EL ANUNCIO. Macri habló del proyecto de ley ante funcionarios de su gabinete y miembros de un centro de jubilados ubicado en cercanías de la Casa Rosada. dyn
28 Mayo 2016
El Gobierno nacional anunció que pagará las deudas por demandas previsionales con sentencia firme y en trámite, actualizará las jubilaciones y pensiones con un aumento promedio del 45%, pero sólo a quienes desistan de la vía judicial, y creará una “Pensión Universal para el Adulto Mayor”.

Todas estas medidas forman parte del “Programa Nacional de Reparación Histórica para Jubilados y Pensionados”, que estará incluido en un proyecto de ley que el Poder Ejecutivo enviará el martes próximo al Congreso, donde la Casa Rosada espera que sea tratado “en tiempo récord”.

Además, el Gobierno anunció que enviará al Congreso un proyecto de ley de blanqueo de capitales, con la promesa de que será el último. Al anunciar esta medida, el presidente Mauricio Macri exhortó a repatriar los capitales no declarados en el exterior, según consigna la agencia DyN.

Con respecto a la ley para los jubilados, el jefe de Estado indicó que se busca reparar años de injusticia. “Nos encontramos con muchas situaciones de jubilados que ganaron juicios y el Estado utilizó cualquier chicana para no pagarles”, remarcó Macri. Los fondos para cubrir esta promesa surgirán, en gran medida, del blanqueo de capitales anunciado ayer también por el jefe de Estado.

La propuesta del Gobierno podría alcanzar a 2,5 millones de jubilados, distribuidos en tres grupos: los que tienen sentencia judicial firme, los que iniciaron una demanda pero aún no tienen sentencia y los que no recurrieron al juicio. En estos casos, para acceder al beneficio deberán renunciar a realizar demandas a través de un convenio con la Anses y homologado por la Justicia.

Los tres casos tendrán una actualización en sus haberes jubilatorios que oscila, según los casos, entre el 35 y el 51%, pero con un tratamiento diferente en lo que respecta a los haberes retroactivos. Aquellos con sentencia firme cobrarán lo adeudado el 50% al contado y el resto en cuotas. A los que no tengan fallo judicial se les pagará con el mismo criterio, pero solamente los últimos 48 meses. Quienes no hayan iniciado juicio no tendrán derecho a retroactividad. El director ejecutivo de la Anses, Emilio Basavilbaso, indicó que el proyecto que el Poder Ejecutivo enviará al Congreso establece que, a partir de la sanción de la ley, todos los que ingresen al sistema previsional cobrarán su jubilación “con los montos actualizados”.

“Un jubilado de estos 2,5 millones cobra actualmente, en promedio 10.000 pesos, y a partir de esta medida pasa a cobrar 14.500. Es el 45% de aumento, que no es un capricho, sino que es hacer respetar una ley, lo que había establecido la Corte Suprema, y que no se cumplía desde hace más de 20 años”, señaló. El costo fiscal de la medida es de 75.000 millones de pesos anuales por los ajustes de las jubilaciones, a los que deben sumarse una suma de 47.000 millones a 55.000 millones de pesos para el pago de los retroactivos.

A esos recursos, la Anses debe agregar la pérdida de unos 21.000 millones de pesos por la devolución a las provincias y al Tesoro nacional de 3 puntos porcentuales de los 15 que percibía de la masa coparticipable. Con respecto a la mecánica de aplicación que establece el proyecto que llegará al Congreso, el funcionario explicó que “con quienes se jubilaron anteriormente, hay que hacer un acuerdo transaccional con la Anses para que empiece a cobrar bien”. “Esto se busca para que no haya futuros juicios. Se firma un acuerdo, se establece el nuevo haber, los pagos de las retroactividades, y a partir de ese momento, comienza la nueva vida del jubilado”, agregó.

Sinceramiento Fiscal

Ahora el Gobierno apuesta a contar con la herramienta de financiación de las subas de haberes. Se trata del proyecto de Ley de Sinceramiento Fiscal (o blanqueo de capitales) -que el Gobierno enviará al Congreso el lunes- y que constará de tres opciones para elección de quienes tienen divisas no declaradas en el exterior o bajo el colchón. A diferencia de programas similares anteriores, cumplirá con todas las reglas del Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI). Así lo informaron fuentes oficiales, quienes subrayaron que este programa “es una oportunidad para los ahorristas y para los argentinos”. Para acceder al sinceramiento fiscal habrá tres opciones: pagar un impuesto especial; suscribir bonos por el monto declarado, o hacer inversiones de largo plazo en el país.

En el primer caso, la alícuota del impuesto que se pagará dependerá del monto declarado. Si la cifra es por un monto equivalente menor a $ 305.000 no tributarán ninguna alícuota; si el monto es de entre $ 305.001 y $ 800.000, el impuesto será del 5%; mientras que por encima de $ 800.001, la tasa será del 10%, indicó el despacho de la agencia Télam. Los que ingresen al programa después del 1 de enero de 2017, deberán tributar una alícuota equivalente al 15%.

Una segunda opción será suscribir bonos del Tesoro por el monto declarado, títulos que tendrán un plazo no menor a un año.

La tercera alternativa será traer el dinero para hacer inversiones de largo plazo en la Argentina para financiar obras de infraestructura, vivienda, créditos hipotecarios o en las PyME. Este “programa de sinceramiento fiscal” no tendrá limitaciones a quiénes puedan ingresar y lo podrán hacer por igual personas físicas y jurídicas.

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