De la mano del Virla y el IDEP, la randa conquistó Buenos Aires

La randa, ese tejido tan nuestro que se elabora con hilo de algodón, agujas de coser y un bastidor, fue una de las estrellas del stand tucumano de la “Feria Puro Diseño”, que se realizó en Buenos Aires.

El libro “Randa. Tradición y diseño. Tucumanos en diálogo”, producto de la asociación entre el Instituto de Desarrollo Productivo (IDEP), el Centro Cultural Virla y Edunt, fue presentado la semana pasada en Buenos Aires. Pero no solo fue la presentación de un libro, cuenta la directora del Virla, Silvina Fénik. “En el stand del IDEP, que representaba a un Jardín de la República con mucho verde, presentamos el libro que muestra historias de vida de tres randeras, así como un relevamiento histórico de esa actividad, más un tutorial , que te permite aprender a hacer randa con sólo seguirlo”, explicó Fénik.

Contó que ejemplares del libro se repartieron en los stands de las otras provincias; y que artesanos de otras regiones se interesaron en la randa, esta expresión de diseño que estuvo al borde de la extinción, y que fue recuperada durante los últimos años por impulso del Virla y el IDEP.

“Lo más interesante es que, así como desde otras provincias se interesaron en saber cómo se hace la randa, a nosotros nos interesó saber cómo se hacen las artesanías de otras provincias. Y ese intercambio permitirá, muy probablemente, una resignificación de la randa, si es que se integra a otras artesanías”, destacó.

Para Fénik, la presentación del proyecto randa en este Puro Diseño 2014 es un hito. Recuerda que los 100 de la UNT, que se festejan por estos días, son un buen pretexto para hacer balances. Y añade que en este contexto celebratorio se inscribe el proyecto de gestión del diseño del Virla, que con los años se ha convertido en un punto de referencia nacional en esa temática.

Tiempo de balance
El balance se impone. ¿Cómo es que el Virla se convirtió en centro de referencia del diseño? “Surgió de la misma manera que cuando se crea un objeto de diseño; primero como una idea, que luego se plasma y se boceta en un formato visual para finalmente volverse tangible, física, real”, sintetiza la funcionaria. Recuerda que 2007 se había presentado como escenario propicio para la implementación de Proyecto Diseño ante la necesidad de espacios y acciones que fortalecieran e hicieran visible el diseño local.

“La acción fundadora fue la apertura de la Tinda Virla, espacio para la exhibición, difusión y comercialización de objetos de arte y diseño local, que se sumó a la ya conocida oferta musical y literaria que ofrecía este Centro. Fueron un conjunto de líneas que se trazaron desde lo experimental a lo formal y del ensayo al prototipo. Proponiendo un proyecto con objetivos a corto, mediano y largo plazo”, recuerda.

Apunta que el proyecto se fortaleció con sus alianzas estratégicas con el IDEP (Instituto de Desarrollo Productivo de Tucumán) y el INTI por medio de su Observatorio de tendencias a partir de la concreción de acciones conjuntas. Esta instancia -continúa- fue fundamental para el desarrollo de este proyecto, que transitamos como una construcción colectiva, un Trabajo en red donde todos los organismos gestionamos con un objetivo común: acompañar el desarrollo y posicionamiento de nuestro diseño y de nuestros diseñadores”, sintetiza Fénik, en su mirada retrospectiva sobre una experiencia que ya está haciendo historia.