Detienen en España al ex dueño de Marsans por delitos comerciales

Detienen en España al ex dueño de Marsans por delitos comerciales

A Díaz Ferran se lo acusa de blanquear capitales. Está considerado uno de los responsables de la crisis de Aerolíneas Argentinas.

EN PICADA. De ser uno de los empresarios más poderosos de Europa, Díaz Ferrán pasó a ser un preso por delitos económicos. REUTERS EN PICADA. De ser uno de los empresarios más poderosos de Europa, Díaz Ferrán pasó a ser un preso por delitos económicos. REUTERS
03 Diciembre 2012
MADRID, España.- El ex propietario del Grupo Marsans, Gerardo Díaz Ferrán fue detenido en Madrid, acusado por la Audiencia Nacional de presunto blanqueo de capitales y ocultación de bienes a sus acreedores mayoristas, a quienes la quebrada empresa de turismo adeudaba alrededor de 45 millones de euros.

Díaz Ferrán, de 69 años, es considerado uno de los principales responsables de la crisis de Aerolíneas Argentinas durante su administración privada. La detención es parte de la Operación Crucero, en que se investiga la quiebra del grupo turístico español, ocurrida en 2010.

En la causa fueron detenidas nueve personas, entre ellas el actual dueño de Nueva Rumasa y de Marsans, Angel de Cabo, a quien acusan junto a Díaz Ferrán y a su antiguo socio, Gonzalo Pascual (fallecido en junio) de ocultar parte de su patrimonio, con el fin de evitar embargos.

Los ex propietarios de la agencia de viajes Marsans y el actual titular del grupo son el centro de la querella presentada por AC Hoteles, Meliá, Pullmantur y el grupo Orizonia, acreedores de Marsans por unos 45 millones de euros.

La causa se remonta a 2010 cuando los directivos vendieron a la empresa Posibilitum las acciones de Marsans, en manos de otra empresa Teinver S.A. Esta operación se realizó presuntamente para ocultar el patrimonio real y así evitar hacer frente a los pagarés sin fondos que Marsans venía entregando desde 2009 a sus mayoristas.

El detenido ex dueño de Marsans también enfrenta otras dos causas judiciales ante tribunales de la Audiencia Nacional, una de ellas por la presunta comisión de delito fiscal en la operación de compra de Aerolíneas Argentinas, en 2002.

El juicio por esta última causa está previsto para febrero, y la fiscalía pide para Díaz Ferrán y para el expresidente de Air Comet (compañía aérea de Marsans) dos años y cuatro meses de prisión y una indemnización conjunta de 99 millones por un delito contra la Hacienda Pública tras la compra de la aerolínea argentina.

Díaz Ferrán y el fallecido Pascual condujeron la aerolínea estatal desde 2001 a través del titular de Air Comet Antonio Mata, un socio minoritario del grupo, y luego en forma directa entre 2005 y 2008.

La participación de Marsans se extendió hasta que el Gobierno argentino resolvió recuperar la gestión estatal ante la calamitosa situación de la empresa que había perdido la mayoría de sus rutas, y sus aeronaves.

Este año, la dirección de la línea de bandera estimó que al momento del traspaso en 2008, Aerolíneas y Austral tenían un Patrimonio Neto negativo de 3.862 millones de pesos.

Luego de que Díaz Ferrán fundó Air Comet en 1997, el Gobierno de José María Aznar a través de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) le adjudicó a Marsans, en 2001, Aerolíneas Argentinas por un precio simbólico, en un proceso sospechado de irregularidades que aún está en los Tribunales.

Según un informe del Tribunal de Cuentas, el Estado español transfirió a una sociedad patrimonial de Díaz Ferrán y Pascual más de 800 millones de euros para sanear la aerolínea, pero de ese dinero sólo habrían destinado unos 200 millones a la compañía, y además con cuatro años de retraso sobre lo pactado.

Díaz Ferrán, quien fue presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE)- y su socio compraron en 1985 la agencia de viajes Marsans al Gobierno español, y como parte del grupo figuraban la aerolínea Spanair, en 1986, y Air Plus Comet, en 1996, entre otras compañías.

La investigación sobre el entramado de empresas incluye el envío de exhortos judiciales a la justicia de Liechtenstein, Suiza, Irlanda, Chipre, Panamá y Colombia, con la intención de encontrar el dinero que tiene su origen en el vaciamiento patrimonial de empresas como Marsans y Air Comet. (Télam-DPA)

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