Recibieron 200 llamados en dos horas, pero Candela no aparece

Ayer lanzaron una campaña para recibir datos sobre la niña desaparecida en Hurlingham. "No me abandonen; vamos a seguir hasta que aparezca", dijo Carola, madre de la niña perdida hace nueve días. Sin datos.

DOLOR. La madre de Candela encabezó la marcha en Hurlingham. TELAM DOLOR. La madre de Candela encabezó la marcha en Hurlingham. TELAM
31 Agosto 2011
BUENOS AIRES.- La campaña "48 horas por Candela Rodríguez" dejó a las claras la conmoción que generó entre los argentinos la desaparición de la niña de 11 años. Ayer, en sólo 60 minutos, los organizadores recibieron 200 llamados telefónicos de personas que aportaron datos sobre el paradero de la pequeña. Sin embargo, ninguno pudo aportar información certera para encontrarla. "No me abandonen, vamos a seguir hasta que aparezca Candela", imploró Carola Labrador, mamá de la niña.

Hace nueve días, la pequeña salió de su casa, situada en la localidad bonaerense de Villa Tesei, partido de Hurlingham. Según testigos, se escucharon gritos. Cuando Labrador salió a la vereda, su hija ya no estaba.

Los investigadores ya realizaron decenas de allanamientos e interrogatorios. Sin embargo, están desorientados. "Se analizaron todos los secuestros, pero hasta ahora no hay una línea que predomine en la investigación", dijo el fiscal general de Morón, Federico Nieva Woodgate. Ayer, incluso, se concretaron procedimientos en casas cercanas al lugar donde desapareció Candela. "No ha aparecido nada significativo", aseveró el fiscal.

Una de las propiedades a las que entró la Policía para buscar pruebas pertenece a un hombre que estaba preso, y que supuestamente está vinculado al papá de la niña, Alfredo Rodríguez, quien purga una condena por robo en el penal de Magdalena.

Nieva Woodgate ordenó que se secuestrara un celular, y no halló indicios que refuercen la hipótesis del ajuste de cuentas.

Sin embargo, no se descarta el rapto por parte de organizaciones dedicadas a la trata de personas o a la pedofilia. Incluso, hay 1.600 policías abocados a la búsqueda de Candela en distintos puntos del país. El foco de los rastrillajes, claro, es Hurlingham, pero no surgieron indicios.

Ante esto, varias organizaciones (como Red Solidaria y Missing Children) convocaron a una vigilia de 48 horas para recibir llamados que den alguna pista.

El evento contó con la participación de Adrián Suar, gerente de Canal 13, y la colaboración de los actores Guillermo Francella y Facundo Arana; de los ex futbolistas Martín Palermo y Matías Almeyda; y del conductor radial Mario Pergolini, entre otros. Ellos son quienes atienden los llamados que se realizan al (011) 4795-7330. "Seguramente alguien sabe algo, no hay ninguna duda, y creo que en las próximos días eso se va a terminar de romper", dijo Suar.

El reconocido director de cine Juan José Campanella también participó de la jornada. "La persona que pueda saber algo y decide no decirlo por una sensación de lealtad equivocada, se convierte en el mismo tipo de monstruo que el captor", advirtió Campanella.

El titular de Red Solidaria, Juan Carr, recordó que hay 210 menores extraviados en el país. "Pero no es muy común que se pierda una chica tan chiquita en la Argentina", remarcó. Y añadió: "estamos desesperados para que ese o esos (captores) digan algo; que alguien rompa el silencio".

Lidia Grichener, presidenta de Missing Children, recalcó que necesitan información urgente sobre Candela. "Les pedimos a todos que miren las fotos. No tengan miedo; si saben algo llamen, estamos para escucharlos", dijo Grichener. Y aseguró que todos los datos son importantes. "No tengan la más mínima duda que todo lo que nos digan va a ser analizado con la seriedad que se merece", agregó.

Carola Labrador también estuvo en la Fundación Ernesto Sábato, en Palermo, donde se realiza la campaña, y pidió que la acompañen hasta encontrar a su hija. "Quienes tengan datos, por favor, que se animen a brindarlos. Alguien tiene que haber visto algo; alguien tiene que saber algo", dijo la mujer.

Además, ante las versiones de que se podría haber fugado, Carola fue contundente. "Mi hija no se fue, no se escapó, se la llevaron. Me la robaron", aseveró. Y concluyó: "la única que puede sentir el dolor que yo siento es otra mamá a la que le hayan robado a su hija como a mí". (Télam-DyN-NA)

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