Héctor Rivoira: "quiero tomarme unas horas para pensar"

BUENOS AIRES (Diego Jemio, especial para LA GACETA).- Todos los medios; los tucumanos, los porteños y hasta los partidarios de Racing esperaron la palabra de Héctor Rivoira luego de la goleada que había sufrido Atlético a manos de Racing, que no había ganado durante el torneo.
Golpeado, "Chulo" comenzó afirmando que mañana se reunirá con los dirigentes para definir si seguirá siendo el técnico de Atlético. "Quiero pedirle disculpas a la gente que hizo semejante viaje para alentar a un Atlético que hoy fue un fantasma, algo tétrico. Soy el responsable de este presente del equipo, así como lo soy del buen fútbol que desplegó en estos 17 meses que llevo en el club", analizó. "Este no fue el equipo -agregó- que arrancó el torneo ni el que merecía tener cuatro o cinco puntos más. Esto tiró todo abajo".
Sobre un posible alejamiento, enfatizó que piensa tomarse unos días. "No decidimos nada. Sé que los dirigentes son gente de buena leche (sic) con la que se puede hablar. Me quiero tomar unas horas para pensar; ahora la prioridad es Atlético".
Por último, el técnico, que debió ver el partido desde la platea visitante porque había sido expulsado contra Vélez, fue duro con el juego que mostró el "decano" e insinuó una crítica sobre la falta de actitud de los jugadores.
"Hablé con el plantel y ellos saben lo que pienso. Saben que dejaron una mala imagen y deben aceptarlo. Lo nuestro fue triste, muchachos. Pero me entristece más la actitud que lo futbolístico. Siempre digo que correr es un acto voluntario", finalizó el técnico, que no se comunicó en ningún momento con sus colaboradores durante el encuentro.