Ambientalistas aprueban lo realizado, pero piden que les den participación

Ambientalistas aprueban lo realizado, pero piden que les den participación

Un dirigente sostuvo que hubo una disminución de los conflictos.

15 Octubre 2009
"Todo el PRI estuvo basado en la eficiencia de las empresas y en la productividad. Siempre hemos insistido que debería partir de las pautas ambientales, pero no lo hace. Como consecuencia de una mejor eficiencia y productividad, es cierto que el impacto ambiental es menor. Pero eso no quita que deberíamos buscar políticas que prioricen las cuestiones ambientales", dijo Juan Manuel Prado Iratchet, secretario de la Federación de Organizaciones Ambientalistas, que participó de la charla que dictó la Secretaría de Medio Ambiente sobre los resultados del Programa de Reconversión Industrial (PRI), en los dos años que lleva de ejecución.
Prado Iratchet opinó que el avanzar, el hacer cosas aunque sea desde el punto de vista productivista, es bueno en la medida de que la eficiencia se logra, y fundamentalmente que se lo controla. Sin embargo, remarcó que se observan ingenios que tienen filtros en sus chimeneas, pero que no los están usando, o que los usan mal. "O sea, a veces se cae en la ineficiencia diaria y en la falta de control", apuntó.
Dejó en claro que las organizaciones ambientalistas no están realizando mediciones sobre las emanaciones de las industrias, pero sostuvo que se observan mejoras. "Hay menos problemas, menos reclamos y menos situaciones conflictivas que en años anteriores", añadió. Prado Iratchet reveló que se viene requiriendo que el Gobierno otorgue participación a las entidades ambientalistas en los programas en marcha. "Venimos insistiendo en que se dé participación a la comunidad, en forma ordenada e institucional. Es una materia pendiente de este tema", observó.
Por su parte, el secretario de Medio Ambiente, Alfredo Montalván, dijo que el organismo se propone  la sanción de una norma de gestión ambiental que contemple un presupuesto mínimo, como establece la Ley General del Ambiente. Dijo que el tratamiento del Riachuelo, en La Matanza, en Buenos Aires, genera una demanda institucional muy fuerte a la Secretaría de Medio Ambiente de la Nación. "En la medida de que den respuestas ahí, nos darán respuestas a nosotros en el trabajo conjunto de la cuenca Salí-Dulce", concluyó Montalván.


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