12 Febrero 2024
(GQ España)
Existe un método de entrenamiento que rompe con las excusas. Hacer ejercicio ya no es una actividad que demanda mucho tiempo. Un tipo de entrenamiento japonés puede ser la solución para aquellos acotados de tiempo, quienes sólo tendrán que disponer de cuatro minutos del día.
A veces es el tiempo el único requerimiento que nos falta para lograr nuestros objetivos. Este se nos escapa y su ausencia frustra nuestros planes. En la mayoría de casos, el entrenamiento físico puede demandarnos mucho tiempo, desde prepararnos; trasladarnos; hacer el ejercicio en sí; volver a nuestras casas y por último ducharnos.
Con una sesión de ejercicio de una hora, más todos los agregados anteriores, hacer actividad física parece hacerse una actividad eterna. Sin embargo, esto no tiene por qué ser así. Existe una solución para aquellos acotados en tiempo y es una técnica llamada Tabata.
El entrenamiento Tabata: un método japonés para los que necesitan ir rápido
Su nombre proviene de un investigador japonés llamado Izumi Tabata. Este desarrolló un entrenamiento apto para los que tienen muchas actividades en el día. Básicamente el sistema de ejercicios consta de intervalos de alta intensidad y corta duración.
El método Tabata es ideal para aquellos tanto que no tienen tiempo o que quieran quemar grasas en un lapso muy corto. Este sistema de entrenamiento suma sólo cuatro minutos, por lo que sólo 260 segundos de tu día tendrás que destinar al ejercicio.
Este consiste en ocho rondas de ejercicios muy simples, divididos por 20 segundos de trabajo intenso y 10 segundos de descanso. La secuencia incluye ejercicios de hombros, espalda, brazos, pectorales, abdomen, glúteos y piernas.
Es importante destacar que esta práctica de alto impacto e intensidad está contraindicada en casos de problemas cardiacos o respiratorios, por lo que es pertinente realizarse estudios clínicos y completar un apto médico antes de realizarla.
Método Tabata: beneficios de realizar este tipo de actividad física
Esta práctica tiene múltiples beneficios físicos, además de ser el aliado de los que necesitan que su vida se mueva rápido.
- Mejora la capacidad aeróbica y anaeróbica.
- Contribuye a quemar grasas rápidamente. Está estimado que una sesión permite reducir alrededor de 13,5 calorías por minuto.
- Incrementa la resistencia muscular.
- Mejora la fuerza y el rendimiento deportivo.
- Disminuye el riesgo de padecer enfermedades del corazón o sufrir de estrés y ansiedad.
Si deseás obtener estos resultados, lo recomendable es realizar la práctica dos veces por semana. Luego, a medida que avanzás en el entrenamiento y la resistencia física aumenta, podés multiplicar la frecuencia a cuatro o cinco veces a la semana, siempre respetando los descansos para que el cuerpo se recupere.
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