03 Diciembre 2018
CAMBIOS. En 2019, el Regional se extendería de marzo a julio a partir de los cambios que introducirá la UAR en el calendario. la gaceta / foto de juan pablo sanchez noli
Cada miércoles, los miembros de Secretaría Técnica de la Unión de Rugby de Tucumán se reúnen para debatir acerca de las diferentes problemáticas que afectan al rugby tucumano, intercambiar ideas y bosquejar posibles soluciones. Con la temporada 2018 dando sus últimos estertores, el balance del órgano conformado por ex entrenadores del seleccionado tucumano (incluido el actual, José Chavanne) muestra aspectos positivos y negativos.
“Sin dudas, lo más destacable fue la competencia de juveniles. Se introdujeron algunos cambios que permitieron un mejor nivel de juego en los torneos”, destaca Gustavo Agüero.
“Las estadísticas que nos facilitó Maximiliano López nos permitieron comprobar que se incrementó el número de tries con respecto al año pasado, así como el tiempo neto de juego por partido”, completa Alejandro Molinuevo, titular de la Secretaría.
Entre las novedades reglamentarias que se ensayaron este año, estuvo la de dividir el torneo juvenil en dos partes: Anual 1 y 2. “Lo que se buscó es desdramatizar la competencia. Si un equipo empieza mal un torneo, tiene una nueva posibilidad en el siguiente y eso impide que los jugadores se desmotiven. Hubo casos de equipos que levantaron mucho en el segundo torneo”, explica Oscar Prado.
Otras variantes que tuvieron impacto significativo fue la de permitir cambios libres -para que todos tengan la oportunidad de jugar- y la de modificar el sistema de reparto de puntos. Por caso, otorgando puntos extra por marcar más de cuatro tries, no recibir tarjetas o incluso informes del árbitro sobre el entrenador, modificaciones que apuntaron a desalentar el juego especulativo y la indisciplina. “Con tal sistema, el ganador podía sumar hasta ocho puntos, y el perder hasta cinco, porque incluso perdiendo sumaba si marcaba cuatro o más tries. Eso obligaba al ganador a defenderse hasta el final”, advierte Julio José Paz (h).
Sin embargo, existen otros puntos a seguir corrigiendo en el rugby de mayores.
MESA DE DEBATE. Prado, Paz, Molinuevo, Chavanne y Agüero, en plena reunión. Prensa URT
“Es preocupante la deserción que se observó en Preintermedia. Hubo clubes que inscribieron muchos jugadores y terminaron sin presentarse directamente. Es un tema que requiere una solución cuanto antes”, remarca Chavanne. “Tal vez con alguna clase de motivación competitiva”, agrega Paz.
El gran desafío, coinciden todos, será el de lograr una planificación conjunta para todos los niveles, desde infantiles hasta mayores. “Sería lo ideal que todos pudieran coincidir en las fechas libres. Estamos buscando la forma de organizarlo así”, sostiene Molinuevo.
“Todo está sujeto a la aprobación del Consejo, pero la idea es tratar de concentrar toda la actividad desde marzo hasta fines de octubre”, completa Agüero.
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