17 Octubre 2017
Científicos de Estados Unidos y de Europa detectaron por primera vez ondas gravitacionales y luz del mismo evento cósmico, informa Reuters. Las ondas, causadas por el choque de dos estrellas de neutrones unos 130 millones de años atrás, fueron detectadas por primera vez en agosto por instrumentos del observatorio de ondas gravitacionales, conocido como LIGO, en el estado de Washington y en Luisiana, además de en un tercer detector, llamado Virgo, en Italia.
Dos segundos después, observatorios en la Tierra y el espacio detectaron un ola de luz en forma de rayos gamma desde el mismo sector del cielo, en el sur, que según los análisis probablemente surgió de la misma fuente. Las estrellas de neutrones usualmente son del tamaño de una ciudad.
Las observaciones hallaron que metales pesados como oro, platino y otros fueron arrojados al espacio tras la fusión de las estrellas, confirmando que eventos catastróficos semejantes posiblemente son la fuente de estos metales.
Albert Einstein predijo las ondas gravitacionales en 1916, como un resultado de su innovadora teoría de la relatividad, que describió la gravedad como una distorsión del espacio-tiempo. Tres científicos estadounidenses que hicieron el descubrimiento de las ondas ganaron el premio Nobel de física este mes.
“Imaginen que las ondas gravitacionales son como el trueno”, dijo Philip Cowperthwaite, astrónomo del Centro de Astrofísica Harvard-Smithsonian. “Escuchamos este trueno antes, pero esta es la primera vez que hemos podido ver la luz”, añadió.
Los instrumentos de LIGO trabajan en conjunto y usan láser para detectar pequeñas vibraciones de ondas gravitacionales cuando pasan a través de la Tierra. Previamente, los científicos sólo podían estudiar el espacio observando ondas electromagnéticas como ondas de radio, luz visible, luz infrarroja, rayos X y rayos gamma.
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