Jorge Domínguez, feliz de volver a Tucumán Rugby

Apenas tuvo tiempo de acomodarse Jorge Domínguez a su regreso de España cuando recibió el llamado de emergencia de los entrenadores de Tucumán Rugby. La partida de Tomás Albornoz al Mundial de Georgia con los Pumitas y la lesión de Marcos Silvetti contra Cardenales dejaron al “Verdinegro” en crisis de aperturas para enfrentar a Belgrano Athletic. Así fue que, más de un año después de su último partido con la primera de su club, Domínguez volvió a ser titular de repente, en cuartos de final de un Nacional de Clubes y contra el campeón de Buenos Aires.

“Extrañaba mucho jugar con los amigos de toda la vida”, reconoce Jorge, que apenas tuvo un encuentro de intermedia para acoplarse al plantel antes de ser llamado a la primera. Se lo vio muy participativo, tanto en ataque como en defensa, aunque el “Marrón” de Virrey del Pino terminó llevándose el pasaje a semifinales. “Deberíamos haber trabajado el partido poco a poco, no desesperarnos tanto por el resultado. Belgrano vino a hacer lenta la pelota, a ensuciarla. Fue un error nuestro no haber sabido contrarrestar eso”, detalla la principal causa de un sueño interrumpido.

Experiencia

Durante el año y monedas que estuvo jugando en la División de Honor, la liga principal del rugby de España, Jorge extrañó de todo lo que tenía que ver con Tucumán Rugby, menos los colores. El verde y el negro identifican también al Gernika Rugby Taldea, club al que el apertura arribó a principios del año pasado para conocer otra realidad: la de quienes pueden darse el lujo de vivir prácticamente para el rugby.

“Fue una experiencia tremenda. Positiva en todos los aspectos. El hecho de conocer otro rugby; de aprender otro idioma, porque allá se habla mucho el euskera; de conocer lugares y sobre todo buenas personas. Eso es lo más importante que me llevo. Aparte, éramos siete argentinos en el equipo (entre ellos, los tucumanos Matías Frías Silva, Matías López e Ignacio Fordham). Se formó un lindo grupo”, subraya.

Como todo, también hubo dificultades. “Por momentos te pesa mucho estar tan lejos de tu familia, de tus amigos, de tu novia. Pero allá la vida es muy tranquila y eso te ayuda a que todo se haga más fácil de llevar”, asegura. ¿Volver? Todavía no lo pensó.

Por ahora, su cabeza está en Tucumán Rugby y en el Regional, cuyo nuevo formato le parece un acierto al apertura. “Está bueno, me parece muy bien que se haya acortado. Me parece que se está pensando más en el jugador que antes. La exigencia física es muy alta y siempre se debe poner a la integridad de los jugadores en primer lugar”.