19 Mayo 2017
Mientras realizaban el rastrillaje para encontrar a Daiana Garnica en los márgenes del Río Salí, los efectivos de la división Homicidios divisaron a “Jacobo”, a quien estaban buscando desde el 15 de enero. Se trata de uno de los sospechosos de asesinar al rondín Alfredo Baigorria, asesinado a balazos en el barrio Barrancas del Salí. El detenido forma parte de un grupo conocido como “Gallos Finos”. Según los vecinos de la zona y los investigadores del caso se trata de un grupo de hombres que se dedica al cuatrerismo y los asaltos.
“Jacobo” tiene 22 años y se estaba escondiendo en una casa cercana al río. Se trata del segundo detenido por este caso. El 25 de abril habían capturado a “Anchila”, de 19. La división Búsqueda y Captura de Prófugos, a cargo de Daniel Robles, lo encontró escondido en una casilla de un asentamiento, no muy lejos del escondite de su cómplice detenido ayer. Ahora, sólo resta encontrar a “Jito” y a “Ceferino”.
Baigorria tenía 38 años y estaba trabajando como sereno cuando murió. Cerca de las 3 de la madrugada, fue atacado a tiros por unas cuatro personas, aunque nunca estuvieron demasiado claros los móviles de esa agresión. El rondín murió de inmediato, tendido en la calle, y el barrio se llenó de furia. Tanto es así que pocos días después cortaron el camino hacia el aeropuerto para exigir justicia por el crimen y más presencia policial en la zona, compuesta también por los barrios Farmacéutico y Viluco.
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