Por LA GACETA
27 Abril 2017
Las imágenes de las motos secuestradas en los depósitos de la Policía dieron que hablar a los editores. Se trata de un fenómeno de los tiempos, tanto desde el punto de vista social como económico. Las motocicletas son protagonistas de esta época -se las encuentra en todos los ámbitos- y las que están depositadas en las sedes policiales dan cuenta de cuestiones vinculadas al transporte, a las posibilidades económicas de las personas, a los accidentes de tránsito y a la inseguridad. El hecho de que haya tantas abarrotadas y arruinándose en los depósitos de la fuerza de seguridad habla de todos esos temas y también da cuenta de los tiempos de la burocracia, que genera más problemas, ya que hay que destinar personal a administrar u cuidar ese material que bien podría ser compactado o devuelto a sus dueños, si el sistema fuera más dinámico. Por ello la foto, muy reveladora, es la central de nuestra portada, y contrasta singularmente con la plácida imagen del patio la Casa Histórica, cuya administración está reacomodando el espectáculo de Luz y Sonido, que será enriquecido con un soporte tecnológico audiovisual. Dos imágenes, dos caras de la realidad.
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