Anastacio sigue asociado a los éxitos

Es un técnico que está tocado con la varita mágica. Habría que revisar los archivos para encontrar un hecho similar al que Juan Martín Anastacio vivió en las últimas tres temporadas. Es que el ex jugador de Central Norte y Atlético, entre otros equipos, consiguió tres títulos consecutivos en el Anual liguista, con tres clubes distintos. En 2014 logró la corona liguista dirigiendo a La Florida, en 2015 lo hizo con Ñuñorco y la pasada lo consiguió con el “Decano”.

Estos antecedentes hicieron que Diego Erroz, coordinador general del fútbol en la entidad de barrio Norte le ofrezca dirigir este año al plantel de Quinta división, que participa en los torneos de la AFA. “Este es un paso adelante en mi carrera. Porque luego de los logros que alcancé en la Liga, este nombramiento me hará crecer en lo profesional”, comentó el entrenador.

A pesar de que desde hace pocos meses está trabajando con el plantel afista, Anastacio ya se dio cuenta de la diferencia que existe entre las competencias locales y la organizadas por la AFA. “Es indudable que los sistemas de juego son completamente diferentes. Así también la formación de los pibes. Pero lo más significativo es que la competencia tiene un volumen superior al que se observa en los partidos de la Liga”, dijo.

Otro nivel de juego

Anastacio considera que si al jugador se le exige ese salto de calidad cuando llega a este nivel de juego, lo mismo debe ocurrir con los entrenadores. “En este tiempo que vine trabajando con el plantel de Quinta, me di cuenta del exigente nivel de competencia que tiene la categoría. Es el paso intermedio que debe hacer un jugador antes de llegar a Reserva y Primera de la AFA. Uno tiene que estar preparado profesionalmente para observar los juveniles que están en condiciones de ser promovidos. Lo bueno es que hoy podemos ver que varios de los pibes surgidos en las inferiores ya están trabajando con el plantel profesional. Un caso palpable es Tomás Cuello, un pibe que con 17 años ya tuvo la posibilidad de jugar en Primera. Algo parecido a lo que vive Gonzalo Ontivero, que tiene 22 años y ya tiene la experiencia de haber jugado a un nivel competitivo exigente. Otro que podría nombrar es Jonas Romero, que ya está en condiciones de dar el gran salto”, aseguró.