"La nueva estrella": una firma al margen de la Ley

"La nueva estrella": una firma al margen de la Ley

La empresa no cuenta con habilitación y jamás dejó de funcionar.

CRITICA. Los vecinos calificaron como “pesados” a los taxistas. LA GACETA/ OSVALDO RIPOLL CRITICA. Los vecinos calificaron como “pesados” a los taxistas. LA GACETA/ OSVALDO RIPOLL
12 Febrero 2017
Sábado a la mañana. Pese a que está lloviendo, una mujer sigue con su costumbre de lavar la vereda de su casa. “Esa empresa está funcionando desde hace rato. Los vecinos lo sabemos porque los que están ahí son todos medio pesados. No tuvimos problemas con ellos, pero con otras personas sí. No les gusta que los critiquen por cómo estacionan los vehículos o porque usan licencias de otros municipios”, aseguró Doña Laura, vecina de la empresa “La Nueva Estrella”.

La mujer, que tiene miedo a sufrir represalias, no sabe que la firma no está habilitada a funcionar. “Sabemos que desde hace varios años están tramitando la habilitación de la firma, pero como no la consiguieron, seguro que terminará cayendo. Además es una empresa que cuenta con automóviles que tienen licencias de otras ciudades y no pueden funcionar”, reconoció Enrique Romero, subsecretario de Tránsito y de Transporte de la capital.

En la vereda de “La Nueva Estrella”, que está ubicada al frente del estadio, se pueden observar autos con licencia de Alderetes, Banda del Río Salí, Las Talitas y San Miguel de Tucumán. “Trabajan así hace muchos años. Parece que a nadie le interesa”, aseguró Juan Carlos, otro vecino que también les teme.

Sus choferes, en los últimos tiempos, fueron protagonistas de algunos incidentes que fueron publicados por LA GACETA. El primero fue cuando escondieron los autos en el estadio de Sportivo para evitar ser descubiertos y, el último, cuando enfrentaron a los municipales que pretendían sancionar a la empresa. “Romero salió a declarar que estaba clausurada, pero nunca dejó de funcionar. Ni siquiera cuando salió a la luz el caso del chico que golpearon”, destacó Mario Rivadeneira.

“El único cambio que se nota es que no se lo volvió a ver más al que aparece pateando al chango en el video. Todos lo reconocen porque daba órdenes y por los tatuajes que tenía”, concluyó.

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