Según la UNT, en octubre se observó un ahorro de $ 500.000 en gasto de personal

Según la UNT, en octubre se observó un ahorro de $ 500.000 en gasto de personal

Una funcionaria reveló que se revisaron los montos por antigüedad que cobraban varios funcionarios universitarios.

MISIÓN. La rectora Alicia Bardón confió en Ascárate el manejo económico. la gaceta / foto de héctor peralta MISIÓN. La rectora Alicia Bardón confió en Ascárate el manejo económico. la gaceta / foto de héctor peralta
12 Noviembre 2016
Las primeras revisiones y algunos ajustes le han permitido a la UNT un ahorro de $ 500.000 en octubre solo en lo vinculado a gastos de personal. Así lo confirmó la secretaria Económico Administrativa, Lidia Ascárate. La funcionaria comentó que apenas asumió pidió la planilla de preliquidación de sueldos y comenzó a revisar varios conceptos. Muchas de las inconsistencias detectadas -y que se derogaron- estaban vinculadas, directamente, a funcionarios del propio gabinete rectoral.

Lo primero que le llamó la atención -explicó Ascárate- fueron los montos por antigüedad que cobraban varios secretarios que, en algunos casos, superaban el 100%. Ese pago estaba amparado en una resolución del ex rector, Juan Cerisola (ver recuadro). Este beneficio fue otorgado en 2010 y acompañaba al cargo, no al funcionario que se desempeñaba en el área. “Esto contradice el concepto de antigüedad que es absolutamente personal”, dijo la ex secretaria Académica de Ciencias Económicas.

No solo eso, también se congelaron cargos docentes de varios funcionarios que durante años cobraron dos sueldos, cuando eso es incompatible. “Apliqué la normativa y lo hicimos como corresponde”, aseguró Ascárate.

El ojo también se lo puso en los adicionales, o sea, en remuneraciones extras que se han extendido en muchos casos sin una razón lógica. “En el caso de los no docentes había adicionales que se estaban pagando (también por resolución) por la misma función real que estaban cumpliendo”, contó la funcionaria. Esto quiere decir que el adicional no se lo daban por una tarea que no les correspondía, sino por la que desempeñaba.

En esa situación encontraron a unos 70 empleados administrativos de algunas unidades académicas. El monto extra era de $ 2.600 por cada uno.

Ascárate explicó que se llegó a esta situación producto de malas interpretaciones o reiterpretaciones que viejas resoluciones.

“También se eliminó el concepto de ‘criticidad’ que cobraban los directores generales. Era un monto fijo mensual que se pagaba, considerando que la función que desempeñaban era crítica”, comentó.

Todo esto les permitió un ahorro que, multiplicado por los meses del año, significará $6 millones anuales. A dos días del desembarco de la comitiva de técnicos de la Secretaría de Políticas Universitarias (SPU) la funcionaria está decidida a mostrar un mensaje claro de que están poniendo las cosas en orden.

Con los ojos en 2017

Ascárate está convencida de que no hay tiempo de mirar hacia atrás. “Respeto la posición del univeristario que quiere saber qué pasó, pero debo trabajar para adelante. Ya estoy pensado en 2017 porque las medidas que tengo que tomar son para adelante. Me desvela hacer las cosas bien para que desde la SPU nos puedan acompañar en el financiamiento”, confesó.

Siente la presión porque sabe que el dinero que se le asignará a la UNT el próximo año es, desde el arranque, escaso. El monto ronda los $ 3.500 millones, pero la UNT había solicitado $317 millones más. Para colmo, luego se aprobó una partida extra que se repartió en 21 universidades y a la UNT no le tocó ni un peso.

Como era de esperarse, las primeras medidas no han caído muy bien. Sin embrago, Ascárate insiste en que le den tiempo y en que hará lo que deba hacer. Apuesta a generar consensos que transmitan que la institución está unida y que todos reconozcan que los cambios son necesarios.

“Este mes por primera vez se ha podido pagar la contribución patronal ($ 21 millones) y no se necesitó de una moratoria. Quiero que vean que honramos la deuda con la AFIP y no que seguimos creándola”, añadió.

Más medidas

La funcionaria explicó que siguen conversando con la comisión paritaria por otros adicionales. Por ejemplo, el ítem “riesgo” que actualmente cobran 700 empleados no docentes. “Esto quiere decir que les pagan un adicional porque trababajan (supuestamente) en un lugar peligroso”, mencionó y agregó que la evaluación de estos casos la hará una comisión de riesgo y seguridad. “Tengo un gasto de $ 1,5 millón mientras que la SPU entiende que por esto solo corresponden $ 300.000, o sea, que tenemos un desfinanciamiento en este punto”.

El lunes por la noche comenzarán a llegar los técnicos de la SPU, con el jefe de gabinete, Mario Gimelli a la cabeza. Habrá reuniones con funcionarios y decanos. Algunos solo estarán un día, mientras que otros técnicos se quedarán hasta el jueves. Es una prueba de fuego para la UNT.

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