03 Septiembre 2015
HITMAN, EL AGENTE 47
Es frío, implacable, eficiente y, sobre todas las cosas, extraordinariamente letal. Se trata de “Hitman, el agente 47”, un sicario creado genéticamente por el doctor Ort-Meyer para cumplir con sus misiones sin dudar.
El personaje surgió en un muy exitoso videojuego diseñado por la empresa danesa IO Interactive, que hace ocho años llegó al cine con un antecedente de la película que hoy se estrena. Esta vez, Hitman encuentra su pareja ideal en Katia van Dees, también fruto de la clonación y con las mismas virtudes mortales de su contraparte masculina. La unión les sirve para luchar contra El Sindicato, una misteriosa y tenebrosa organización, mientras que tienen como objetivo final encontrar al padre de Katia. Los riesgos los acompañan en la huída que emprenden.
Ninguno de los principales responsables de la primera entrega de esta historia se repite esta vez. Sólo está el mismo código de barras tatuado en la nuca, distintivo especial de la granja de producción de agentes criminales; el rostro pétreo del principal actor y muchos disparos y peleas cuerpo a cuerpo. Faltan sorpresas en el mundo del espionaje y armas de precisión.
Es frío, implacable, eficiente y, sobre todas las cosas, extraordinariamente letal. Se trata de “Hitman, el agente 47”, un sicario creado genéticamente por el doctor Ort-Meyer para cumplir con sus misiones sin dudar.
El personaje surgió en un muy exitoso videojuego diseñado por la empresa danesa IO Interactive, que hace ocho años llegó al cine con un antecedente de la película que hoy se estrena. Esta vez, Hitman encuentra su pareja ideal en Katia van Dees, también fruto de la clonación y con las mismas virtudes mortales de su contraparte masculina. La unión les sirve para luchar contra El Sindicato, una misteriosa y tenebrosa organización, mientras que tienen como objetivo final encontrar al padre de Katia. Los riesgos los acompañan en la huída que emprenden.
Ninguno de los principales responsables de la primera entrega de esta historia se repite esta vez. Sólo está el mismo código de barras tatuado en la nuca, distintivo especial de la granja de producción de agentes criminales; el rostro pétreo del principal actor y muchos disparos y peleas cuerpo a cuerpo. Faltan sorpresas en el mundo del espionaje y armas de precisión.
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