Cartas de lectores

Su majestad satánica, la cola (I)

Las iniciativas tardan, pero a veces llegan. En 2007, es decir, hace ocho años, presenté como legislador provincial el proyecto de ley que regulaba la espera en las colas. Esas esperas no podían exceder más de 30 minutos, bajo la penalidad de una sanción pecuniaria, es decir, la aplicación de una multa. El caso de las colas, inclusive, fue abordado también en el Panorama Tucumano de Roberto Delgado, del 14 de marzo 2014, titulado “Su majestad satánica, la cola”. Celebro que ahora la Legislatura haya sancionado la ley cuyo contenido, aparentemente, se asemeja bastante a la iniciativa, motivo también de esa columna periodística. Solamente espero que los parlamentarios hayan zanjado la problemática que en su momento se argumentó para impedir el progreso de mi iniciativa. El impedimento argumentado hace ocho fue fue que numerosas entidades y organismos nacionales (el Banco Nación, la Universidad Nacional de Tucumán, el PAMI, la Anses, la AFIP...), en su organigrama y en su funcionamiento administrativo interno, escapan a la normativa provincial por pertenecer al ámbito federal. Desconozco en lo personal cómo quedo sancionada la ley.

Carlos Canevaro
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Su majestad satánica, la cola (II)

Tal cual se indica en un articulo de ayer, ya es una costumbre en diferentes instituciones y lugares de cobros y de pagos de cuentas que los usuarios deban ir preparados para sufrir las grandes demoras en las colas que se forman para cumplir con sus obligaciones. Es el caso del Banco del Tucuman (casa central u sucursales), encargado de pagos de sueldos a empleados públicos y jubilados, donde las esperas son interminables, incluso teniendo en cuenta que allí concurren personas mayores. Otro tanto ocurre en el Banco de Santiago del Estero, donde tembien los usuarios hacen colas a la intemperie, con lluvia o con sol. Lo mismo se da en otros centros de pago que resultaría innumerable detallar. También hay que anotar en estas situaciones a la sede del Subsidio de Salud, donde las esperas son insoportables, a pesar de que se paga más que en muchas otras obras sociales. Cuando se formula un reclamo allí, los que reciben la queja responden como si fuesen los dueños y se debe acatar lo malamente impuesto por los directivos, que jamás se preocupan de los reclamos de los afiliados. Igual cuadro se encontrará en organismos nacionales como el PAMI, la Anses o la AFIP. En esas entidades hay que hacer las colas desde muy tempranas horas o el vecino no consigue turno para ser atendido. Las esperas nunca son menores a dos horas. Por lo expuesto, queda la duda de si a las instituciones les gusta que se vea que los ciudadanos tienen que sufrir las esperas; o si lo que realmente ocurre es que, a pesar de sus recursos y de sus ganancias -según el caso-, les falta infraestructura y personal para cumplir mas rapido con lo que la sociedad necesita. Por lo pronto, es deseable que esto se solucione en forma inmediata para el bien de todos.

Mario O. Rivet
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Avenida Siria y Delfín Gallo

La esquina de la avenida República Siria con la calle Delfín Gallo es una intersección que registra una constante circulación vehicular, debido a que en esa zona se encuentra ubicado un moderno centro comercial y una estación de GNC. A ello que se suma que ese sector es una de las entradas obligadas hacia algunos barios populosos, como lo son el ATEP y Los Pinos, entre otros. Por todas estas circunstancias, resulta que ahora transitar por esa esquina se ha tornado prácticamente imposible. No tan solamente por el hecho de que Siria y Delfín Gallo se ha transformado en una laguna crónica, sino también porque sus baches, que en verdad merecen el calificativo de “históricos”, se han transformado en verdaderas zanjas, sólo sorteables por vehículos 4x4. Invito por este medio al intendente Domingo Amaya a que envíe personal de la Municipalidad de San Miguel de Tucumán para verificar lo que pongo de manifiesto; y que de una buena vez encare los trabajos correspondientes para hacer transitable nuevamente esta esquina, que por ahora parece reservada sólo para el turismo aventura.

Rafael Horacio Cruz
José Manuel Estrada 772 - Barrio ATEP
San Miguel de Tucumán

Día Americano del Indio

Todos los 19 de abril se conmemora el Día Americano del Indio. En su homenaje quiero compartir un breve relato de mi autoría, titulado “El adiós”. El mismo, dice así: “En las sombras, el indio vio el fogonazo, oyó el estampido y sintió el mortal aguijón. Herido, corrió a su izquierda y, bajo la frondosa copa de un árbol, se sentó. Allí cantó sus últimas coplas a la madre tierra, que tantos años lo cobijó. Sus ayes punzaban la quietud de los árboles, y su sangre regaba la tierra de los mortales. El dolor del adiós lo acogía en su seno, como a la semilla dormida, en su vientre ampara la flor. Los pájaros soñolientos, espantados por el ruido, huían del bramido de las armas y del indio. Aquella noche la luna lloró, su aflicción materna la desbordó. Y el hombre arisco, amante satelital, bajo un cielo sereno durmió su sueño fatal”.

Daniel E. Chavez
Pje. Benjamín Paz 308
San Miguel de Tucumán

Formación y debate docente

Se realizó una positiva jornada del “Programa Nacional de Formación Permanente - Nuestra Escuela”, el viernes pasado. Hubo debates muy esclarecedores: “No sé si llegan a algún lado las devoluciones que realizan los docentes. Ellos son los que conocen mejor el terreno (la escuela). Las propuestas que llegan son de laboratorios ideales”. Estas palabras reflejan el método de las reuniones: decenas de propuestas, o iniciativas, del interés docente, que no tienen carácter ejecutivo ni mucho menos consultivo. También se debatieron cuestiones pedagógicas. Por ejemplo: la tendencia, en el secundario, a reemplazar la formación científica o universal por “habilidades y saberes”, llamados tecnicaturas, cuyo objetivo es una educación fragmentada, parcial, unilateral y de rápida obsolescencia. Todo ello, justificado con diversos argumentos: “los docentes como constructores del saber” o la “inclusión”. Por ultimo, analizamos las situación de nuestras escuelas, donde votamos los pasos pedagógicos y administrativos concretos y necesarios para su mejoramiento institucional, de cara a la comunidad educativa. Más allá de lo debatido, se comprobó la dificultad para aislar a la situación educativa de la descomposición, la catástrofe social y el derrumbe de las familias. En opinión personal, solamente a través de un Congreso Pedagógico, que cuente con representaciones de docentes, de estudiantes y de trabajadores, y que posea carácter ejecutivo, puede dar una salida a la crisis educativa y plasmar, en hechos, las llamadas “devoluciones”, para el engrandecimiento de nuestras escuelas. Conclusiones: importante jornada, organizada por el Ministerio de Educación.

Pedro Verasaluse
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La publicidad opositora

Con referencia a la carta del lector Julio Argentino Gómez publicada en esta sección el viernes pasado (“Tiempos electorales”), creo que el autor de la misiva recorrió San Miguel de Tucumán con un GPS que le indicaba específicamente dónde se encuentra ubicada la publicidad oficial. Digo esto porque, si nos fijamos bien, la publicidad de la alianza electoral que ha sido celebrada por el jefe de Gobierno porteño Mauricio Macri -PRO-, la diputada nacional Elisa Carrió -Coalición Cívica- y el senador nacional Ernesto Sanz -Unión Cívica Radical- (referentes que se encuentran representados en nuestra provincia por el diputado nacional José Manuel Cano y compañía), me atrevo a asegurar que triplica la publicidad oficial. Con respecto a quién financia esa publicidad oficial, yo no me preocuparía tanto. Lo que sí me angustia, en cambio, es qué van a pedir como retribución los más de 2.000 comensales que pagaron $ 50.000 cada uno para asistir a la “cena con empresarios” en el pabellón amarillo del predio ferial de La Rural, en Palermo, donde el macrismo recaudó más 100 millones de pesos durante el pasado 17 de marzo. A esa comida asistieron los integrantes de la Sociedad Rural Argentina y de la Unión Industrial, los principales referentes de las terminales automotrices y de los grandes sojeros argentinos, etcétera. Tenga la seguridad el lector Gómez, que estos “buenos muchachos” no se destacan, precisamente, por ser personas a quienes les guste regalar dinero.

Fernando Carlos Brunet
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Una campaña sin contenidos

He visto San Miguel de Tucumán verdaderamente empapelado de propagandas de nuestros postulantes a consagrarse en los comicios generales del 23 de agosto como gobernantes de mi Provincia. Debo decir que esa situación me parece de lo más inadecuado. En verdad considero sumamente inconveniente que para llegar a ser conocidos y renombrados como hombres que pretenden llegar a ocupar los más altos cargos de la función pública, los candidatos utilicen papeles y símbolos que nada me informan. Simplemente veo fotografías y nada conozco acerca de cuáles son sus inquietudes reales; ni acerca de su manera de proceder, por ejemplo, ante la falta de seguridad que padecemos; ni acerca de proyectos sobre el resto de las problemáticas de la provincia. Es necesario que los ciudadanos veamos contenidos, dentro de un sistema democrático, sin atropellos, y conscientes de que necesitamos otra manera de proceder. Basta campañas que derrochan de miles de pesos.

Carlos Rubén Ávila
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Billetes de denominación más alta

Don dinero es poderoso mediador. Todos lo quieren cada vez en mayor cantidad, pero no quieren que se emita más moneda. Exigen mayores sueldos, pero no quieren que aumenten los precios. Exigen mayor seguridad, pero obligan a los jubilados a retirar más plata del banco. En los últimos cinco años, el salario mínimo vital y móvil y la jubilación aumentaron tres veces y media. Antes, un jubilado pasaba por el banco y retiraba 12 billetes de $ 100; ahora, sale del banco con 40 billetes. ¡No tienen idea de la preocupación de esas personas con semejante bulto de dinero, con el que prácticamente están avisando a los delincuentes que llevan un montón de plata encima! Señores dirigentes políticos y sindicales: no toda la población se maneja con tarjetas; y la cantidad de billetes que nos obligan a llevar encima para pagar las cuentas es por demás exagerada. Es mi opinión que luego de lograr aumentos de un 100% en cuatro años, usando para tal fin a los que menos ganan, retribuyan a los argentinos con un beneficio general, y exijan la emisión de los billetes de 200 y de 500 pesos. De esa manera, los podremos esconder en las medias y podremos evitar a los arrebatadores.

Roberto Nicolás Córdoba (h)
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La carta de Leuco al Papa

El periodista Alfredo Leuco ha cometido el error, por el cual pidió disculpas, de plantear abiertamente al papa Francisco una inquietud que existe en la mente de muchos argentinos. Esa inquietud está basada, por un lado, en declaraciones públicas del Santo Padre, en las cuales él dijo que siente que los políticos argentinos lo han usado; y, por otra parte, en la próxima visita de la señora Presidente de la Nación, política ella, al Vaticano. El yerro del señor Leuco planteó una supuesta contradicción política y espiritual entre lo que el Santo Padre declaró sobre los políticos y su decisión de recibir a la titular del Ejecutivo Nacional. Este equívoco del periodista permitió que el Santo Padre le respondiera y que nos iluminara con su repuesta. También es justo recordar que el señor Leuco defendía pública y valientemente al Sumo Pontífice, en cuanto medio tenía a su alcance, cuando era conocido como el cardenal Jorge Bergoglio. En ese entonces, muchos de los que hoy se rasgan las vestiduras en contra del señor Leuco guardaron un cobarde silencio. El Santo Padre ya demostró que no necesita de defensores oportunistas. El Santo Padre ya perdonó las ofensas cometidas en su contra, como también estoy seguro de que ya perdonó el error cometido por el señor Leuco. Ya llegará la hora, como nos llegará a todos, de que tanto la señora Presidente de la Nación como el señor Leuco respondan ante la Justicia de los hombres, y para el caso de que logren sortearla, no escaparan de la Justicia de Dios, como no lo haremos ninguno de nosotros. El papa Francisco, entiendo, no sólo recibe a una estadista argentina con investidura presidencial, sino que recibe antes que nada a una persona, a una hermana, hija del mismo Padre del que todos nosotros somos hijos. La buscó cuando se llamaba cardenal Bergoglio y la busca ahora, cuando se llama Papa Francisco. El hombre no cambió, sólo cambió su nombre.

Pedro Isaac Pabón
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