“Tenemos una deuda con la homeopatía: estudiar la patogenesia del lapacho”

“La homeopatía no es magia ni brujería. Es una medicina que contempla al ser humano en su totalidad y no en forma parcial, considerando que el hombre no es un conjunto de órganos sino un todo. Y si es una unidad nos enfermamos entero y no por partes”, definió el doctor Oscar Rojas, presidente de la Asociación Médica Homeopática de Tucumán, en su charla con LA GACETA.

- ¿Cómo examinan al paciente?

- Observamos al ser humano en su enfermedad -incluso su órgano enfermo-, pero teniendo en cuenta que es una unidad y que el que está enfermo es el hombre entero: tanto su energía vital como su parte orgánica.

- Aquí radica la diferencia con la medicina convencional...

- La medicina alopática es de tipo organicista: se considera que está enfermo el hígado, las amígdalas o los riñones, etc. y se trata la enfermedad. La homepatía considera que esa unidad -el ser humano- está regida por una fuerza vital: la energía que nos mueve. La vida es la energía vital que nos anima tanto en la salud como en la enfermedad. Para el homeópata es muy importante esa energía vital.-

- ¿En qué se basa la terapia homeopática?

- En un principio que fundamentó Hipócrates: “lo igual se cura por lo igual”, y que más tarde Samuel Hahnemann (entre 1810 al 1816) corrobora ese principio al plantear de vuelta que “lo similar cura lo similar”. Es decir que si yo tengo fiebre voy a tomar un medicamento que me produzca fiebre y la respuesta de mi organismo será el descenso de la temperatura, similar a la respuesta a las vacunas. Para que no tengamos sarampión nos inyectaron virus de sarampión, para evitar la tuberculosis nos han fabricado una TBC. Esto se denomina isopatía (el sistema que trata una enfermedad por medio del virus de la misma enfermedad).

- Actualmente ¿la gente comenzó a confiar más en los remedios homeopáticos porque son menos complejos que los de la medicina alópata?

- Sí. Observamos que la gente que llega por primera vez al consultorio nos dice que teme intoxicarse con tantos remedios o drogas que toma y que desconoce cómo actúan. En cambio, en la homeopatía, sí conocemos cómo actúan. Sabemos cuáles son los efectos del medicamento mediante una experimentación que se llama patogenesia (experimentación del medicamento en un hombre sano) y los resultados de esta investigación están volcados en los libros “Materia médica”. El homéopata que indica un medicamento por vez sabe a ciencia cierta lo que ese medicamento produce.

-¿Existe una variedad de remedios homeopáticos?

- En homeopatía tenemos más de 3.000 remedios experimentados, y los tucumanos tenemos una deuda con la homeopatía: estudiar la patogenesia del lapacho, un encargo de nuestros profesores de Buenos Aires que no lo hicimos aún porque somos pocos los homeópatas tucumanos. Volviendo al medicamento que usamos en homeopatía, se trata de un remedio dinamizado que adquiere propiedades diferentes al estado crudo. Por ejemplo: un gramo de hierro crudo tiene un efecto en el organismo, pero un gramo de hierro dinamizado (es decir sacándole la energía) adquiere otras propiedades distintas y más profundas. Dinamizar implica hacer que el medicamento tenga la energía que equilibrará la energía vital del organismo. Usamos un remedio único y no un complejo de medicamentos.

- ¿En qué se basa la ley de la curación?

- La ley de la curación nos provee de una herramienta muy útil, en el sentido de que uno puede pronosticar la evolución del paciente. Esta ley nos dice que nos tenemos que curar desde adentro hacia afuera, desde lo más profundo o importante a lo más superficial o menos importante. Por eso la medicina homeopática se llama unicista.

-Un paciente ¿puede dejar un tratamiento con fármacos alopáticos y sustituirlos por los homeopáticos?

- Depende del caso. Es difícil obtener un medicamento para el cáncer porque hay tantos cánceres como genes... Si viene un paciente medicado para la hipertensión no puedo sacarle el medicamento alopático de golpe. Lo mismo ocurre con la persona con diabetes e insulinodependiente o con hipotiroidismo... Pero hay muchos medicamentos que sí se pueden sacar, como por ejemplo los antiinflamatorios y corticoides. El primer síntoma que sienten los pacientes que inician el tratamiento homeopático es la sensación de mejora y bienestar.