Una joven describe el acoso verbal de obreros de una construcción

Una joven describe el acoso verbal de obreros de una construcción

Aixa Rizzo subió un video para denunciar el calvario provocado por empleados que trabajan en la puerta de su casa hace un mes. Ahora tiene custodia policial.

ACOSADA. Aixa Rizzo ahora vive con custodia policial en Caballito. ACOSADA. Aixa Rizzo ahora vive con custodia policial en Caballito.
07 Abril 2015

BUENOS AIRES.- "Si te incomoda leerlo, imaginate escucharlo", reza la campaña de Acción Respeto, una organización que realiza intervenciones en la vía pública para concientizar sobre el acoso callejero que sufren las mujeres diariamente. Tal es el caso de una joven del barrio de Caballito, quien ha subido un video en YouTube donde cuenta la violencia verbal de unos obreros instalados desde hace un mes en la puerta de su casa.

"Desde que empezó la obra, lamentablemente, como tiene la costumbre la gente que trabaja en la calle, me gritan groserías y me ponen bastante incómoda, de hecho. En una oportunidad les había pedido que lo dejaran de hacer y funcionó, pero sólo un día", relató Aixa Rizzo, el nombre elegido para preservar su identidad. Sin embargo, con el correr de los días, la situación empezó a ponerse más tensa.

"No sé si se trata de obreros que estaban arreglando el alumbrado público o la luces de las casas. Me gritan groserías constantemente y me da mucho miedo porque sabían todos los movimientos de la casa", denunció indignada la joven, que vivió el peor momento cuando salió de su casa, se vio emboscada por cuatro empleados y escapó de ellos tirándoles gas pimienta.

"Empezaron a insultarme, que no era para tanto, que era una loca de mierda. Cuando fui a hacer la denuncia me dijero que por un piropo no podía hacer la denuncia. Cuando conté que me dijeron 'Te vamos a romper el ort...', tomaron conciencia y pusieron custodia policial", agregó la víctima, quien reveló un "consejo" del policía a cargo de su seguridad: "Le dijo a mi mamá que la próxima vez será mejor que yo no reaccione porque me pueden acusar por agresión. Se los dejo a su criterio. Pero que la cultura de la violación existe y que hay una impunidad total está más que claro".

Publicidad
Tamaño texto
Comentarios
Comentarios