25 Octubre 2014
ANUNCIO. El alcalde Bill de Blasio llama a la calma a los neoyorquinos. reuters
NUEVA YORK.- Un médico que trató a pacientes con ébola en África Occidental fue internado en una unidad de aislamiento en Nueva York luego de dar positivo al mortal virus, convirtiéndose en el cuarto caso diagnosticado con la enfermedad en Estados Unidos y el primero en la ciudad más grande del país. Craig Spencer, de 33 años, fue puesto en cuarentena en una unidad de aislamiento del Hospital Bellevue el jueves, seis días después de volver de Guinea, generando nuevos temores sobre la propagación de la enfermedad en Estados Unidos y sacudiendo a los mercados financieros. Tres personas que tuvieron contacto con Spencer, facultativo del grupo humanitario Médicos sin Fronteras, se encontraban en cuarentena para observación -una de ellas, su prometida, en el mismo hospital- pero todos están todavía sanos.
El diagnóstico de ébola en la ciudad más poblada renovó preocupaciones sobre su propagación en Estados Unidos, donde previamente se registraron tres casos en el estado de Texas. La noticia sobre el primer caso de ébola en Nueva York provocó una caída de los mercados.
El peor brote de ébola del que se tenga registro ha causado la muerte de al menos 4.877 personas y quizás hasta 15.000, la mayoría en Liberia, Sierra Leona y Guinea, según cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS). El organismo puso en movimiento planes para acelerar el desarrollo y distribución de vacunas experimentales deberían estar listas para su uso en África Occidental a mediados de 2015.
Un comité de supervisión del Gobierno de la Cámara de Representantes, liderado por republicanos, evaluará la respuesta del Gobierno Barack Obama ante el ébola. El alcalde Bill de Blasio y el gobernador Andrew Cuomo intentaron convencer a los neoyorquinos de que están a salvo del ébola, aún cuando funcionarios revelaron que Spencer viajó por la ciudad en metro, tomó un taxi y fue a jugar bolos entre su regreso de Guinea y el desarrollo de los síntomas. “No hay ninguna razón para que los neoyorquinos se alarmen”, dijo de Blasio. Cuomo afirmó que a diferencia de Dallas, donde dos enfermeras que atendían a un paciente contrajeron la enfermedad, los sanitaristas neuyorkinos tuvieron tiempo para prepararse. (Reuters)
El diagnóstico de ébola en la ciudad más poblada renovó preocupaciones sobre su propagación en Estados Unidos, donde previamente se registraron tres casos en el estado de Texas. La noticia sobre el primer caso de ébola en Nueva York provocó una caída de los mercados.
El peor brote de ébola del que se tenga registro ha causado la muerte de al menos 4.877 personas y quizás hasta 15.000, la mayoría en Liberia, Sierra Leona y Guinea, según cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS). El organismo puso en movimiento planes para acelerar el desarrollo y distribución de vacunas experimentales deberían estar listas para su uso en África Occidental a mediados de 2015.
Un comité de supervisión del Gobierno de la Cámara de Representantes, liderado por republicanos, evaluará la respuesta del Gobierno Barack Obama ante el ébola. El alcalde Bill de Blasio y el gobernador Andrew Cuomo intentaron convencer a los neoyorquinos de que están a salvo del ébola, aún cuando funcionarios revelaron que Spencer viajó por la ciudad en metro, tomó un taxi y fue a jugar bolos entre su regreso de Guinea y el desarrollo de los síntomas. “No hay ninguna razón para que los neoyorquinos se alarmen”, dijo de Blasio. Cuomo afirmó que a diferencia de Dallas, donde dos enfermeras que atendían a un paciente contrajeron la enfermedad, los sanitaristas neuyorkinos tuvieron tiempo para prepararse. (Reuters)
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