Dulzuras aptas para diabéticos y celíacos

No somos todos iguales, pero todos tenemos derecho a la igualdad de oportunidades. Y resulta que “te tocó” ser goloso, y, al mismo tiempo, diabético; o celíaco... ¡o las dos cosas! O decidiste optar por una alimentación naturista, y eliminar de tu vida el trigo y el azúcar. No te preocupes: un poco de ingenio y podrás disfrutar un rico postre o la torta de tu cumpleaños.

Las harinas
Las harinas son un problema para los celíacos y para los diabéticos. En el primer caso, porque aportan muchos hidratos de carbono, que el cuerpo transformará en azúcar. En el caso de los celíacos, son problemáticas las que contienen gluten (ver “Vida sana...”). “Pueden ser reemplazadas por harinas de arroz y de mandioca”, explicó Aída Savransky, propietaria de un negocio naturista de Laprida al 600. También es interesante trabajar con harina de maíz, pero hay que estar alertas a la contaminación cruzada. Las de Arcor y Carrefour están certificadas libres de TAAC”, añadió.

Propuesta vegana
“Para nuestra repostería saludable no usamos lácteos ni derivados, harina de trigo, huevo ni endulzantes artificiales. Para diabéticos usamos stevia, un endulzante natural no calórico”, explicó la doctora Graciela Varela, médica homeópata y directora de Prosanar, antes de compartir esta receta sabrosa y sencilla: llevá a hervir 1 litro de leche de almendras (ver modo de preparación aparte) y añadí 2 tazas de arroz yamaní hervido y cociná durante 5 minutos. Incorporá 3 cucharadas de fécula de maíz disuelta en agua fría y cociná 5 minutos más. Perfumá con vainilla, agregá ½ taza de coco rallad y endulzá a gusto son stevia. Mezclá bien, poné en una flanera, compactá un poco, dejá enfriar y serví espolvoreado con coco rallado o canela.

RECETAS

Torta morena
Mezclá 200 g de harina de almendras con 80 g de cacao amargo, 2 cucharaditas de canela, 1 de cardamomo, 1/2 de jengibre y una pizca de clavo de olor molido. Aparte, batí 5 huevos con 1 1/2 taza de sucralosa hasta lograr una mezcla blanquecina. Agregá 1 cucharadita de esencia de vainilla y, después, la harina de almendras con las especias, mezclando con movimientos envolventes. Por último, añadí una copita de oporto. Humedecé con rocío vegetal un molde de 27 cm de diámetro y volcá allí la masa. Cocina a 175° durante unos 25 minutos. Dejá enfriar y desmoldá.

Pavlova de frutillas 

Para este postre neocelandés, prepará merengue como el de la receta 2, pero antes de hornear poné, sobre el disco de base, un aro del mismo merengue, de manera que quede una cavidad. Horneá y dejá enfriar. Mientras, lavá bien, sacá los tronquitos y cortá 1 1/2 taza de frutillas frescas; ponelas en un bol con unas cucharadas de sucralosa. Batí 1/2 taza de crema de leche hasta que quede firme y agregá otra 1/2 taza de queso blanco; endulzá con sucralosa. En la corona de merengue poné la crema mezclada con frutillas. Decorá con más frutillas y hojas de menta.

Merengue básico

Batí a punto de nieve 3 claras. Agregá de a poquito 1 cucharadita de almidón de maíz, 1/2 cucharadita de polvo de hornear, 1/2 taza de edulcorante en polvo apto para hornear y 1 cucharadita de esencia de vainilla. Seguí batiendo hasta que se formen picos y poné la masa en una manga de repostería. Podés hacer merenguitos o planchas para armar tortas: hay que ponerlos sobre una asadera cubierta con papel enmantecado en horno mínimo precalentado a 150°C durante una hora. Luego, apagá el horno, pero déjalo allí por 30 minutos más.

Torta de naranja

Herví durante 45 minutos dos naranjas criollas maduras. Cuando estén completamente frías cortalas en cuartos y sacá todas las semillas. Ponelas en la procesadora y añadí 250 g de harina de maíz (procesá la polenta aparte, para que sea un poco más finita), 150 g de edulcorante en polvo apto para cocinar y 6 huevos. Mezclá unos 30 segundos y agregá 75 g de manteca y una cucharadita colada de polvo de hornear. Enmantecá un molde tipo savarin, poné allí la masa y horneá unos 45 minutos (o hasta que el “típico” palillo salga seco).

Pionono sin harina

Batí 3 huevos y 1/2 taza de edulcorante apto para cocinar hasta alcanzar punto letra. Tamizá 4 cucharadas de leche en polvo descremada con 1 cucharadita de polvo de hornear y añadilas luego a las yemas, alternadas con una cucharada de esencia de vainilla. Colocá la mezcla sobre una placa forrada con papel manteca y rociada con spray vegetal. Horneá de 8 a 10 minutos. Si lo querés para enrollarlo, desmoldalo caliente sobre un repasador, retirá el papel y arrollalo. Esperá que esté frío para rellenarlo.

Leche de almendras para reemplazar la de vaca en recetas veganas

Lavá las almendras media hora en agua fría con un chorrito de agua oxigenada de 10 Vol. Cambiá el agua y remojalas 24 horas en frasco de vidrio sin tapa. Ponelas un ratito en agua hirviendo y quitales la piel. Licualas (1 taza para 1 litro de leche) agregando de a poco el agua para que la licuadora la triture bien. Filtrá y listo.