22 Marzo 2014
PREOCUPADO. Francisco no quiere que se repitan casos de abuso infantil. REUTERS
El papa Francisco nombró hoy a ocho miembros de la Comisión que instituyó para la tutela de los menores, y entre ellos hay una víctima de abusos sexuales por parte de un religioso y un cura y teólogo argentino.
La irlandesa Marie Collins, de 66 años, es conocida en el Vaticano desde hace dos años, cuando concurrió a un simposio sobre pederastia organizado en la Universidad Gregoriana para dar testimonio sobre los abusos que sufrió cuando tenía 13 años por parte de un sacerdote.
Mientras que el cura argentino es Humberto Miguel Yáñez Molina, un jesuita nacido en Mendoza, director del departamento de Teología moral de la Universidad Gregoriana y amigo del papa Francisco. El resto de miembros son la francesa Catherine Bonnet; la psiquiatra británica Sheila Hollins; el profesor de derecho canónico, el italiano Claudio Papale, el sacerdote y teólogo alemán Hans Zollner y la polaca Hanna Suchocka, quien fue primer ministro del país desde 1992 hasta 1993 y es conocida por sus numerosos ensayos sobre Derechos Humanos.
El arzobispo de Boston, cardenal Seán Patrick O`Malley, conocido por su lucha contra los abusos en la Iglesia, también fue nombrado para integrar la comisión.
El objetivo de estas personas será preparar los estatutos de la Comisión que definirán las competencias y las funciones y que posteriormente nombrarán a otros miembros para que se integren a este organismo, según la nota de la oficina de prensa del Vaticano.
El portavoz del Vaticano, Federico Lombardi, recordó que el papa decidió crear esta Comisión para dejar claro "que la Iglesia debe tener entre sus prioridades más altas la de la protección de los menores" y que los nombres indicados "son altamente cualificados y conocidos por su compromiso en este tema".
La Comisión, añadió Lombardi, adoptará medidas para promover de varias maneras la protección de los menores, "de esta manera, contribuirá a asegurar la seguridad de la juventud", agregó el portavoz vaticano según la agencia de noticias Efe.
La idea de la creación de este órgano que abanderará la lucha contra la pederastia surgió en una de las reuniones del llamado G8 vaticano, un consejo formado por ocho cardenales creado por Francisco para que le ayuden a reformar la Curia.
La irlandesa Marie Collins, de 66 años, es conocida en el Vaticano desde hace dos años, cuando concurrió a un simposio sobre pederastia organizado en la Universidad Gregoriana para dar testimonio sobre los abusos que sufrió cuando tenía 13 años por parte de un sacerdote.
Mientras que el cura argentino es Humberto Miguel Yáñez Molina, un jesuita nacido en Mendoza, director del departamento de Teología moral de la Universidad Gregoriana y amigo del papa Francisco. El resto de miembros son la francesa Catherine Bonnet; la psiquiatra británica Sheila Hollins; el profesor de derecho canónico, el italiano Claudio Papale, el sacerdote y teólogo alemán Hans Zollner y la polaca Hanna Suchocka, quien fue primer ministro del país desde 1992 hasta 1993 y es conocida por sus numerosos ensayos sobre Derechos Humanos.
El arzobispo de Boston, cardenal Seán Patrick O`Malley, conocido por su lucha contra los abusos en la Iglesia, también fue nombrado para integrar la comisión.
El objetivo de estas personas será preparar los estatutos de la Comisión que definirán las competencias y las funciones y que posteriormente nombrarán a otros miembros para que se integren a este organismo, según la nota de la oficina de prensa del Vaticano.
El portavoz del Vaticano, Federico Lombardi, recordó que el papa decidió crear esta Comisión para dejar claro "que la Iglesia debe tener entre sus prioridades más altas la de la protección de los menores" y que los nombres indicados "son altamente cualificados y conocidos por su compromiso en este tema".
La Comisión, añadió Lombardi, adoptará medidas para promover de varias maneras la protección de los menores, "de esta manera, contribuirá a asegurar la seguridad de la juventud", agregó el portavoz vaticano según la agencia de noticias Efe.
La idea de la creación de este órgano que abanderará la lucha contra la pederastia surgió en una de las reuniones del llamado G8 vaticano, un consejo formado por ocho cardenales creado por Francisco para que le ayuden a reformar la Curia.
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