Con las clases vuelven los piojos

Con las clases vuelven los piojos

La Sociedad Argentina de Pediatría aconseja una serie de acciones para controlar la pediculosis en los meses de mayor contagio. Ponelas en práctica con tus chicos.

COSTUMBRE. Vinagre y agua, una de las fórmulas caseras mas eficaces. LA GACETA / ARCHIVO COSTUMBRE. Vinagre y agua, una de las fórmulas caseras mas eficaces. LA GACETA / ARCHIVO
02 Marzo 2013
Tanto como la mochila o el delantal, el peine fino es fundamental para el inicio de clases. Si bien los piojos pueden aparecer en cualquier época del año, marzo y abril son los meses de mayor infestación, momento que coincide con la vuelta al aula y la temperatura que aún se mantiene alta.

La pediculosis se produce a través del contacto estrecho y prolongado con el pelo de una persona infectada. Esto sucede entre los niños durante el juego o entre personas que comparten la misma cama. No saltan ni vuelan, pero los piojos pueden transmitirse también como consecuencia del uso compartido de cepillos, peines, sombreros, toallas u otros elementos. Los areneros, las colchonetas y las piletas de natación son también lugares habituales de contagio. Por ello algunas escuelas y colegios tucumanos han erradicado los espacios con arena.

El piojo es hematófago: se alimenta de la sangre del cuero cabelludo que succiona a través de dos piezas dentales. En la acción de morder el insecto inocula saliva que produce enrojecimiento y una molesta picazón. Esta suele ser más intensa en la nuca y detrás de las orejas; los piojos prefieren esta localización por ser más cálida y húmeda.

La Sociedad Argentina de Pediatría recomienda a los padres seguir estos consejos para combatir la pediculosis: remover liendres y piojos tres veces por semana (el domingo, por ser la jornada anterior a la vuelta a la escuela, es un buen día); enjuagar el pelo con vinagre diluido en partes iguales con agua mientras se pasa repetidamente un peine fino (esto despega las liendres y actúa como repelente, pero no es pediculicida); aplicar productos pediculicidas mas conocidos que contengan como agente activo permetrina, piretrinas y lindano. Siempre es conveniente consultar las opciones a un pediatra o a un dermatólogo.

Por otra parte, la institución destaca que nunca debe mojarse el cuero cabelludo con insecticidas, nafta, kerosene ni productos veterinarios, ya que son sumamente tóxicos para los niños. Últimamente se ha popularizado el uso de pipetas para pulgas, piojos y garrapatas, de uso animal, para el tratamiento de la pediculosis en los niños. Estas son peligrosas y hasta pueden producir la muerte.

También aconsejan que durante el cursado de clases se debe mantener el cabello siempre bien limpio, corto, y si está largo, usarlo recogido; revisar periódicamente la cabeza de los niños, en especial detrás de las orejas y en la nuca; y tratar de que no apoyen la cabeza directamente en el suelo, el pasto o la arena.

En la casa es ideal que usen shampoo, crema o la loción recetada por el médico. Los padres deben lavar la ropa con agua caliente, plancharla y hervir peines. No es una solución raparle la cabeza al niño.

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