La conversión comenzó desde adentro de la obra

"Hace 20 años, cuando yo ni siquiera conocía el mensaje de Lourdes, tenía un sueño que se repetía. Una mujer de blanco que me decía: 'No prometo hacerla feliz en este mundo sino en el otro'. Mucho después reconocí la frase. A lo largo de estos años fui creciendo tanto en la fe como profesionalmente y hoy, con orgullo puedo decir soy cristiana y quiero servir a mi Madre", confesó Graciela Weiss, quien junto a Carlos Kanán dirigen la representación "El Mensaje de Lourdes".

El sábado fue un día especial para Graciela, no sólo por los 15 años de la obra (los dos primeros años fue dirigida por Ricardo Salim) sino también por la visita de su hija. "Nació el 11 de febrero y, además, como no vivía acá, hoy (por el sábado) es la primera vez que verá El Mensaje de Lourdes", contó emocionada. Graciela, al igual que Carlos, pertenece al Grupo de Lourdes, que todos los años lleva a cabo la representación, aunque desde hace tiempo vive en Buenos Aires. Viene a Tucumán sólo para dirigir la obra.

Carlos también ha experimentado un crecimiento espiritual inesperado. "Creo que alguien me puso en esta senda milagrosa, no es casual que me haya dedicado a obras religiosas (además de Lourdes dirige "La Pasión y muerte de Nuestro Señor Jesucristo")", reconoce.

Compromiso personal

Para Silvia Elías de Pérez, autora del guión (además de legisladora provincial), la organización de la fiesta de Lourdes cada año es un compromiso personal. "Siento tanta felicidad en mi corazón como que le estoy haciendo la fiesta a la persona que más amo", dijo sin dejar de sonreír.

"En la gruta, anoche (por el viernes) un señor contaba que hacia 15 años que no volvía a la Iglesia. Otra devota revelaba que le había pedido a la Virgen que ayude a su hijo que tiene problemas de adicciones. Después de orar intensamente el chico le dijo que quería curarse y le pidió que lo ayude a salir. ¡Esas son las maravillas que se producen en la gruta de la Virgen! El hecho de que María me permita la gracia de que yo sea una de sus servidoras es una felicidad indescriptible", agregó.

El Grupo de Lourdes vivió intensamente junto a los jóvenes la fiesta de la Virgen, que duró una semana y se extiende hasta hoy.

u CONFESIONES.- Muchos se confesaron para poder recibir las indulgencias plenarias que concedió el papa Benedicto XVI para esta fiesta.

u MUCHO PÚBLICO Y PRESENCIA RELIGIOSA.- Los espectadores ocuparon las 10.000 sillas y desbordaron el predio hacia la ruta, donde se hacía la representación. A menudo los actores les pedían que se corrieran, lo que ocurre por primera vez. También hubo mucha presencia religiosa. Se encontraban la madre dominica Marta Campi, con sus 89 años (cumplirá 90 el 23 de abril), junto a otras religiosas, y 18 Hermanas de la Cruz, casi todas españolas, que se encontraban en Tucumán participando de un retiro espiritual.