18 Noviembre 2011
CON ESA CARA... El ex presidente del FMI está ahora implicado en una red de proxenetismo. AFP
PARIS, Francia.- Dominique Strauss-Kahn, el ex jefe del FMI y frustrado candidato socialista a la presidencia de Francia, no tiene paz desde que empezaron a salir a la luz detalles de la investigación de escándalos sexuales y prostitución.
Tras las acusaciones de violación de una mucama del hotel Sofitel en Nueva York y de intento de violación a la periodista francesa Tristane Banon, el ex precandidato presidencial socialista protagoniza ahora un escándalo en el que se habla de orgías con mujeres pagadas. Según la investigación, el empresario Fabrice Paszkowski le habría provisto chicas con el interés de obtener negocios si llegaba a ser presidente de Francia.
Esta semana, la prensa francesa publicó los testimonios de prostitutas. "Dominique Strauss-Kahn tiene una gran vitalidad; sobre todo con las chicas nuevas", contó la prostituta de lujo Florence, en declaraciones que publicó el diario francés "Le Parisien".
Así fue que DSK, como lo llama la prensa, quedó envuelto en la investigación policial sobre el "affaire Carlton": una trama de proxenetismo con base en la ciudad francesa de Lille.
Florence dijo que estuvo con el defenestrado candidato socialista en 11 orgías, celebradas en un período de seis años. "Sé que hubo otras fiestas a las cuales no fui invitada, por lo que sospecho que le gusta la variedad", apuntó, según el diario español "El Mundo".
Por sus atenciones durante un fin de semana, en el Hotel W de Washington, ella y su compañera Mounia cobraron, cada una, 2.400 euros. "Es un hombre muy atento hacia las mujeres y nunca violento", reveló Florence, según el diario "L?Express". Dos días después, fue detenido acusado de violar a una mucama del Sofitel de Nueva York.
La suma de los relatos de las prostitutas, unidos a datos y fechas suministrados por la fiscalía, sirve para componer un perfil terrible de las aventuras sexuales de Strauss-Kahn en distintas ciudades, entre febrero de 2009 y mayo de 2011.
"En la primavera de 2010, compartí una suite con piscina privada en el hotel Murano de París, con Dominique y otras tres chicas. El amigo que nos contrató dijo que cada una tendría que tener una relación sexual con su invitado", rememora Mounia, una mujer de 38 años y madre de dos hijos que hoy vive retirada del negocio y lleva velo.
Aquellas "soirées" libertinas, como las llamaba el economista, eran pagadas presuntamente por su círculo de amigos de Lille: el empresario Paszkowski, el directivo de la compañía Eiffage David Roquet, y el comisario Jean-Christophe Lagarde, según "El Mundo".
Las prostitutas eran suministradas por el dueño del Hotel Carlton en Lille, Hervé Franchois; el director del establecimiento, Francis Henrion; y el relaciones públicas René Kojfer. Ellos a su vez, contactaban a las chicas a través de Dominique Alderweireld (alias Dodo la Saumure), propietario de ocho "bares de alterne" en Bélgica, donde la prostitución es tolerada.
"Sus correrías con la ?pandilla de Lille? eran, para Dominique, una bocanada de aire que le sacaba de su rutina con los intelectuales de la ?gauche caviar? (la izquierda que come caviar)", contó un allegado a "Le Nouvel Observateur".
Según esta revista, el economista se había exiliado en Washington para recuperarse luego de que Ségolène Royal le ganó en los comicios internos del PS.
Desde allí, Strauss-Kahn hacía escapadas sexuales a Viena, París, Bruselas, Praga, Nueva York y Madrid, como certifican unos SMS interceptados a su colega Paszkowski por los policías. "¿Quieres venir a descubrir una disco canalla en Madrid conmigo (y con material)?", le proponía DSK a Fabrice en un mensaje de texto.
La filtración de estas comunicaciones, publicadas por el diario "Libération", parten de dos celulares de Paszkowski y una laptop de Roquet. Además de las misivas "hot", se encontraron alusiones a contactos con políticos del Partido Socialista francés. (Especial)
Tras las acusaciones de violación de una mucama del hotel Sofitel en Nueva York y de intento de violación a la periodista francesa Tristane Banon, el ex precandidato presidencial socialista protagoniza ahora un escándalo en el que se habla de orgías con mujeres pagadas. Según la investigación, el empresario Fabrice Paszkowski le habría provisto chicas con el interés de obtener negocios si llegaba a ser presidente de Francia.
Esta semana, la prensa francesa publicó los testimonios de prostitutas. "Dominique Strauss-Kahn tiene una gran vitalidad; sobre todo con las chicas nuevas", contó la prostituta de lujo Florence, en declaraciones que publicó el diario francés "Le Parisien".
Así fue que DSK, como lo llama la prensa, quedó envuelto en la investigación policial sobre el "affaire Carlton": una trama de proxenetismo con base en la ciudad francesa de Lille.
Florence dijo que estuvo con el defenestrado candidato socialista en 11 orgías, celebradas en un período de seis años. "Sé que hubo otras fiestas a las cuales no fui invitada, por lo que sospecho que le gusta la variedad", apuntó, según el diario español "El Mundo".
Por sus atenciones durante un fin de semana, en el Hotel W de Washington, ella y su compañera Mounia cobraron, cada una, 2.400 euros. "Es un hombre muy atento hacia las mujeres y nunca violento", reveló Florence, según el diario "L?Express". Dos días después, fue detenido acusado de violar a una mucama del Sofitel de Nueva York.
La suma de los relatos de las prostitutas, unidos a datos y fechas suministrados por la fiscalía, sirve para componer un perfil terrible de las aventuras sexuales de Strauss-Kahn en distintas ciudades, entre febrero de 2009 y mayo de 2011.
"En la primavera de 2010, compartí una suite con piscina privada en el hotel Murano de París, con Dominique y otras tres chicas. El amigo que nos contrató dijo que cada una tendría que tener una relación sexual con su invitado", rememora Mounia, una mujer de 38 años y madre de dos hijos que hoy vive retirada del negocio y lleva velo.
Aquellas "soirées" libertinas, como las llamaba el economista, eran pagadas presuntamente por su círculo de amigos de Lille: el empresario Paszkowski, el directivo de la compañía Eiffage David Roquet, y el comisario Jean-Christophe Lagarde, según "El Mundo".
Las prostitutas eran suministradas por el dueño del Hotel Carlton en Lille, Hervé Franchois; el director del establecimiento, Francis Henrion; y el relaciones públicas René Kojfer. Ellos a su vez, contactaban a las chicas a través de Dominique Alderweireld (alias Dodo la Saumure), propietario de ocho "bares de alterne" en Bélgica, donde la prostitución es tolerada.
"Sus correrías con la ?pandilla de Lille? eran, para Dominique, una bocanada de aire que le sacaba de su rutina con los intelectuales de la ?gauche caviar? (la izquierda que come caviar)", contó un allegado a "Le Nouvel Observateur".
Según esta revista, el economista se había exiliado en Washington para recuperarse luego de que Ségolène Royal le ganó en los comicios internos del PS.
Desde allí, Strauss-Kahn hacía escapadas sexuales a Viena, París, Bruselas, Praga, Nueva York y Madrid, como certifican unos SMS interceptados a su colega Paszkowski por los policías. "¿Quieres venir a descubrir una disco canalla en Madrid conmigo (y con material)?", le proponía DSK a Fabrice en un mensaje de texto.
La filtración de estas comunicaciones, publicadas por el diario "Libération", parten de dos celulares de Paszkowski y una laptop de Roquet. Además de las misivas "hot", se encontraron alusiones a contactos con políticos del Partido Socialista francés. (Especial)
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