Luis Gálvez, amo y señor de las travesías

Luis Gálvez, amo y señor de las travesías

Angel Bustos y Sergio Acuña escoltaron al aventurero, que ganó de punta a punta

PARA UN CUADRO. Un expedicionario pasa por la cascada del Río Colorado, uno de los lugares más hermosos. GENTILEZA AVENTURARSE.COM PARA UN CUADRO. Un expedicionario pasa por la cascada del Río Colorado, uno de los lugares más hermosos. GENTILEZA AVENTURARSE.COM
12 Mayo 2011
Los aventureros debían madrugar. A las 4 de la mañana del sábado se presentaron para la entrega del pasaporte de carrera, es decir, una hora antes de la largada de la distancia principal: los 80 kilómetros.

En esos momentos, la adrenalina estaba al máximo y se podía casi palpar en el aire. Alumbrados sólo por sus linternas e imaginando su estrategia de carrera, los aventureros comenzaron a transitar el circuito.

A lo lejos, el grupo de expedicionarios parecía una serpiente de pequeñas luces que iba dibujando los primeros kilómetros de carrera, con rumbo a Horco Molle, y en busca del primer puesto de control.

Desde la partida y luego de recorrer 7,5 kilómetros del circuito, Luis Gálvez lideró de punta a punta. Todo este tramo de carrera lo completó en 55 minutos, en plena oscuridad y sólo con la pequeña luz de su linterna.

A todos los corredores se los vio enteros y motivados. Era el inicio de una carrera que más adelante, iba a ser muy dura. Los terrenos en esta primera parte fueron variados con asfalto, tierra colorada del cauce del río Muerto y de la barranca de entrada a la Cuesta Vieja.A las 6.30 de la mañana, más de 90 corredores habían pasado por el primer puesto de control. A Gálvez lo siguió, cinco minutos después, Angel Bustos y luego Sergio Acuña, que lo cruzó a las 6.03. Hasta allí eran los tres punteros en esta primera etapa.

La ruta del primer control al segundo presentó bastantes particularidades. Una escena muy bella de la carrera en esta etapa ocurrió cuando los corredores cruzaban una pequeña corriente de agua, y a metros de ellos se desplegaban en todo su esplendor las cascadas del Río Colorado.

En esta parte de la travesía, la luz artificial se transformó en natural y se disfrutó mucho mejor los bellos paisajes

En este punto comenzó otra carrera, con más sabor de aventura. Los corredores sólo volvieron a ser vistos cuando bajaron de la montaña en Tafí del Valle a unos pocos kilómetros del arco de largada.

De principio a fin

Pasaron por zonas muy conocidas de la altura alrededor de Tafí, Anfama, Alto de la Aguada y La Ciénaga, hasta la llegada, con Gálvez a la cabeza dueño de la carrera de principio a fin; amo y señor de las montañas.

Tamaño texto
Comentarios
Comentarios