Los insectos más frecuentes en el cultivo de trigo en la campaña 2022 fueron los pulgones y arañuelas, con un 43% de respuestas en cada caso; le siguieron la oruga cortadora. Eso se desgrana de la encuesta que realizaron técnicos de la sección Economía de la Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres (Eeaoc).

En el 76% de la superficie se realizó una sola aplicación de insecticida, mientras que en el 24% restante, ninguna. Los principios activos más usados fueron abamectina -un 29% de los encuestados-, la mezcla de neonicotinoide más piretroides -un 24%- y dimetoato o clorpirifos -también un 24%-.

De 2021 al año pasado, el rinde medio del trigo en Tucumán disminuyó casi 0,2 t/ha

Los productores encuestados consideraron que tuvieron la incidencia de numerosas malezas que compitieron con el cultivo de trigo destacando algunas más importantes por su intensidad y de más difícil control, respectivamente. Las malezas más frecuentes en el área relevada fueron cardo, cebadilla y cenizo.

Los resultados del sondeo muestran diferentes comportamientos por departamento y tipo de maleza entre las que se destaca que en Graneros fueron más frecuentes el cardo, la avena y el cenizo. En la Tabla, señaladas en rojo, se indican las malezas de más difícil control: nabos/nabillos y el cardo, en el departamento Burruyacú; el cardo, la malva y la cerraja, en el departamento Graneros. En general, en la provincia, las malezas de más difícil control fueron el cardo, la parietaria, la malva y los nabos/nabillos.

Trigo: en el 98% del área sembrada se usó semilla curada

Respecto de la cantidad de aplicaciones de herbicidas para su control, en el 78% de la superficie relevada se realizaron dos aplicaciones, en un 21% una aplicación y solo en un 1%, tres aplicaciones.