Una cultura en pleno crecimiento

Recomendaciones de expertos

La Argentina cuenta con una gran variedad de quesos (se producen más de 100 tipos), con sus estilos y sabores bien definidos. Cada persona consume entre 11 y 12 kilos por año. La elaboración quesera del país alcanza las 500.000 toneladas y se divide en el 50% para quesos blandos, el 35% para los semiduros y el 15% para los duros; y el 70% de los quesos producidos en el país se consume en el mercado interno y el resto se exporta, según informó la asociación de pequeñas y medianas empresas lácteas Apymel. Las principales cuencas lecheras de la Argentina se localizan en la región pampeana (Buenos Aires, Santa Fe y Córdoba), y en una segunda instancia entran Tucumán y Entre Ríos, contribuyendo al abastecimiento de toda demanda interna.

Con los años, según expertos en el rubro, hubo significativos cambios en el consumo ya que se buscan nuevas experiencias gastronómicas. Desde Fa Fa, expertos en quesos y charcutería, se explicó: “la sociedad se abrió mucho más a los quesos, si bien tenemos un toque francés porque es uno de sus orígenes. Los productores argentinos reformularon e innovaron las recetas e hicieron sus propias creaciones, por lo que hay quesos realizados en Tafí del Valle, en Buenos Aires, en Córdoba y en todas las provincias. La cultura va creciendo y cada vez hay más variedad; por ejemplo, en el local llegamos a los 60 tipos de quesos”.

Por su parte, Sofía Chenaut, dueña del “Tambo La Sofía”, ubicado en los Valles Calchaquíes, precisó: “hacemos muzzarella, un queso hilado, que hace mucho tiempo sólo se usaba para hacer pizzas y hoy el consumidor hace bombitas de queso, milanesas napolitanas y también lo usa en entradas en platos fríos porque se dieron cuenta de que rinde más y tiene un sabor distinto a otros quesos”. La cultura del queso se diversifica y ya se trabaja con nueve tipos de quesos para rallar, argentinos e italianos.

Respecto de las variedades, “hacemos quesos saborizados con orégano y ají, y también hacemos quesillo, que es un producto muy regional y es una variedad de queso hilado con una receta propia”, expresó Chenaut.

En Fa Fa dicen que “hay quesos blandos, la mayoría de estilo francés. Trabajamos brie y camembert, bombón chino -que vienen de la familia de la mozzarella-, burrata, ricota; quesos duros importados, mayormente italianos; quesos blandos y semiduros”.

En tanto a los cuidados, se recomienda que los quesos duros sean conservados entre los 8ºC y 12ºC, mientras que para los quesos blandos y los azules se deberán elegir temperaturas más bajas, entre 4ºC y 8ºC. Un buen queso va acompañado de un buen vino. Las recomendaciones son: si es un vino fuerte combina con un queso suave y viceversa; a los blancos se los ofrece para los quesos suaves; los quesos blandos van con miel, ya sea de abeja o de caña; los frutos secos pueden ir con cualquier queso; el queso gruyere, con aceitunas negras y tomate cherry; los quesos azules, con membrillo; la burrata, con damasco; y el brie y el camembert, con granadas, uvas y kiwis.  El queso queda espectacular con frutas como el mango, la papaya y la guayaba. El queso de cabra combina bien con frutas dulces, como higos, caquis y dátiles. Edam y gouda, con ciruelas y duraznos. Por supuesto, dicen los expertos, hay diversas combinaciones para cada paladar. (Producción periodística: Emilse Valerio).

LÁCTEOS LUZ AZUL

CALIDAD Y PRECIO EN UN SOLO LUGAR

El camino de Lácteos Luz Azul empieza con 80.000 litros de leche fluida que llevan los tamberos a la planta industrial. Sigue con la elaboración de quesos, crema, ricota y dulce de leche, llega a los locales de venta directa al público y termina en la mesa de los argentinos.

A partir de 2012 la marca comenzó con el formato de franquicia; actualmente son 70 en todo el país. Desde la fábrica de la marca en la provincia de Buenos Aires, se procesan más de 50 productos propios en distintas presentaciones. Cuentan con un formato de negocio moderno que se adapta de manera permanente a las necesidades del mercado donde intentan llegar a todos los consumidores.

Su aplicación exclusiva de compras acompaña muy de cerca esta dinámica, además de estar en otras plataformas de terceros. Trabajan constantemente en mantener una excelente relación precio-calidad.

La marca Luz Azul no se consigue en supermercados, ya que los únicos canales de venta son los locales franquicias. La atención y asesoramiento personalizado, la limpieza y excelente predisposición, son los principales pilares diferenciales de la empresa, además de la amplia variedad de productos, como quesos especiales (brie, camembert, pepatto, di fossa, entre otros), quesos ahumados, blandos, hilados, duros y semiduros estacionados, burratas, boconccinos, provoleta. Así también tienen una exquisita y amplia selección de fiambres, encurtidos, aceites de oliva, conservas y aderezos gourmet.

Otro producto que sin duda los hace destacar son sus picadas armadas por encargo; son su gran carta de presentación en todas sus variedades y tamaños. Y les sigue de cerca su dulce de leche.

Lácteos Luz Azul cuenta con dos locales en nuestra provincia, uno en Yerba Buena ubicado en Moreno 390 donde podés contactarte y pedir delivery a través del 3812088556. El otro está en San Juan 809, San Miguel de Tucumán, con número de contacto 3816875469. Seguilos en sus redes sociales Instagram lacteosluzazul y Facebook Lácteos Luz Azul.

PICAR MARKET

ENCONTRÁ TODO EN UN SOLO LUGAR

Picar Market, Quesos, fiambres y vinos, comenzó como un sueño. Hoy es un referente a la hora de comprar fiambres y quesos premium.

Su atención y principalmente sus precios, lo convierten en un lugar donde puedes cubrir muchas necesidades gracias a la amplia variedad de productos que maneja. Procura crear un ambiente diferente donde la gente se sienta cómoda al comprar, donde el asesoramiento personalizado permita a quienes los visitan encontrar todo lo que necesita. Y si se presentan dudas, ellos se encargarán de recomendarte cómo acompañar cada producto.

Algunos de sus artículos más destacados son sus picadas con productos de alta calidad. Están elaboradas con una gran variedad de quesos artesanales, fiambres importados, frutos secos y hongos de primera. Además también podrás encontrar dulces, aceites, salsas, panes, bebidas y mucho más. Todo está pensando en generar momentos inolvidables. Incluso si antes de comprar no estás seguro en tu elección, puedes probar sin problema.

Su objetivo es que la compra sea una toda una experiencia. Su premisa es ser un negocio que cumple deseos, ya que la gastronomía hoy cumple un rol fundamental en el espíritu de la gente y quieren acompañarlo.

Picar tiene muchas metas a futuro, y la innovación y la opinión del público son elementos que utilizan para mantenerse en tendencia. De hecho esperan de a poco introducir nuevos productos, principalmente preparados por ellos mismos.

Además se mantiene en constante capacitación, para conocer mejor a sus proveedores y los procesos de fabricación. Recientemente realizaron una especialización sobre vino, cultura, degustación, variedades y maridaje.

Se encuentran ubicados en avenida Aconquija 118, Yerba Buena. Y podés seguirlos en sus redes sociales como @picar.yerbabuena.

BREVE HISTORIA

Más de 6.000 años de sabor

El Día Internacional del Queso es una fecha para destacar la producción de uno de los alimentos más valorados del mundo. El registro más antiguo de su elaboración es del año 6000 A.C., en la Mesopotamia asiática. En el país, de quesos con inspiración europea como el reggianito, el sardo, el provolone, el gruyere o gruyerito y el port salut, se crearon versiones locales. Otros se asociaron a su lugar de origen como el Banquete de Tandil (usado en festejos), Lobos, el Lehmann, el Río Negro, el Neuquén Fresco y su impronta criolla.