“Valió la pena darme la cabeza contra la pared”, confesó Ángel Di María, hablando de lo mucho que le costó alcanzar la gloria. Y dijo más: “Leo tiene que estar en el próximo Mundial, sí o sí. Es el mejor de la historia”. ¿Y su futuro: “Ya no sueño con el Mundial. Pero con la próxima Copa América sí”.