A dos meses de aumentar la retención de Ganancias sobre los gastos de turistas en el exterior, el Gobierno avanza en un nuevo esquema para el llamado dólar tarjeta. Se busca desalentar la salida de divisas por ese segmento en alerta por el Mundial de Qatar y la temporada de verano.

La intención es canalizar los dólares disponibles para el segmento productivo -importaciones- y desactivar o reducir aquellos que se escurren por viajes y turismo.

La decisión de modificar el esquema del dólar tarjeta estaría tomada y alguna fuentes dan cuenta de un inminente anuncio en ese sentido. En el equipo que encabeza Massa trabajaron en distintas opciones para encarecer aún más los gastos de la gran cantidad de argentinos que viajan al exterior y en particular los que lo hará en noviembre al Mundial de Qatar.

Las medidas para el dólar tarjeta en evaluación:

•Aumentar el recargo de Ganancias sobre el dólar tarjeta o turista. Sería en torno a los 7 puntos (para equiparar el valor al dólar blue) por lo que el anticipo del impuesto a las compras en el exterior con tarjeta de crédito pasaría al 52%.

•Desactivar la devolución de la retención de Ganancias por los gastos en divisas realizados con tarjeta. Hasta ahora, una vez al año, los contribuyentes de ese impuesto, y quienes no están alcanzados, pueden tramitar ante la AFIP la devolución de la percepción por la compra de dólar ahorro (35%) y los tarjeta (45% desde julio) realizadas en el período fiscal anterior.

•Fijar que quienes tengan gastos en el exterior deban comprar dólar MEP para hacer frente a esos gastos. Hoy el tipo de cambio financiero está unos 20 pesos por encima del tarjeta.

Dólar tarjeta versus dólar para la producción

Las medidas que ultima el Gobierno para el dólar tarjeta buscan reforzar “el veranito” cambiario que otorga a las reservas del Banco Central el dólar soja, por el que ya ingresaron más de US$2500 millones en lo que va del mes, y la promesa de mayores giros por parte de los organismos internacionales de crédito hacia cumplir las metas acordadas con el FMI.

A eso se sumará, si lo aprueba el directorio del Fondo en las próximas semanas, un giro por US$4000 millones del propio FMI, por el cumplimiento de las metas del segundo trimestre, que Massa conversó con Kristalina Georgieva este lunes en Washington.

Ese “colchón” de dólares permitiría al Gobierno pilotear lo que resta del año y volcar parte de esas divisas para las importaciones indispensables para las importaciones.