WASHINGTON, Estados Unidos.- Las fuerzas del orden se están preparando para un posible estallido de violencia cuando la Corte Suprema de Estados Unidos emita una sentencia sobre el aborto, que dará marcha atrás con un derecho garantizado desde 1973, de interrumpir embarazos no deseados. Todo apunta a que la sentencia, que previsiblemente se conocerá a finales de junio, retirará la protección federal a la interrupción del embarazo, por lo que los estados con gobiernos contrarios al aborto podrán prohibir el acceso a este derecho reproductivo. Se espera que la decisión final del tribunal se conozca a finales de junio.

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Se espera violencia por parte de grupos de ultraderecha y de extremistas racistas, informó Axios, citando un memorando del Departamento de Seguridad Nacional (DHS), cuya autenticidad confirmaron agencias noticiosas.

Los funcionarios están investigando las amenazas en las redes sociales dirigidas a los jueces del máximo tribunal del país, así como las dirigidas al personal del tribunal, las iglesias y las clínicas que proveen servicios de salud sexual y reproductiva, entre ellas, la interrupción del embarazo.

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La filtración de un borrador de opinión sobre un caso relacionado con el aborto que se está tramitando en el tribunal y que podría limitar drásticamente el derecho a la interrupción del embarazo, ha desencadenado una ola de protestas, que se expresó el 14 de mayo, con manifestaciones en cientos de ciudades. Miles de personas se manifestaron en ciudades de todo Estados Unidos durante el fin de semana para reclamar el derecho al aborto y han prometido un “verano de rabia”.

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El Departamento de Justicia de Estados Unidos reforzó la semana pasada la seguridad de los jueces de la Corte Suprema, ya que algunos manifestantes se manifestaron ante las casas de al menos tres miembros conservadores del tribunal.

Pero el memorando desclasificado del 13 de mayo de la unidad de inteligencia del DHS decía que los extremistas también podrían atacar a los defensores del derecho al aborto y que la decisión también podría envalentonar a los supremacistas blancos, según el informe.

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“El hecho de que algunos extremistas violentos con motivaciones raciales o étnicas abracen las narrativas denominadas “provida” puede estar vinculado a la percepción de querer 'salvar a los niños blancos’ y ‘luchar contra el genocidio blanco’”, dijo el departamento, según Axios.

Cuando se le preguntó por el informe, un portavoz del DHS dijo que “está comprometido con la protección de la libertad de expresión de los estadounidenses y otros derechos civiles y libertades civiles, incluyendo el derecho a protestar pacíficamente”.

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El DHS también se compromete a trabajar con entidades públicas y privadas “para compartir información e inteligencia oportuna, prevenir todas las formas de violencia y apoyar los esfuerzos de las fuerzas del orden para mantener nuestras comunidades seguras”, añadió el portavoz. (Reuters)