En Clodomira, Santiago del Estero, una niña de tres años tomó ácido muriático y se encuentra internada en estado delicado en el Centro Provincial de Salud Infantil (Cepsi) de la provincia. Se trata de una sustancia muy potente, que perjudica los órganos y, habitualmente, se usa para destapar cañerías.

La menor llegó al hospital acompañada por su padre de 30 años quien explicó a los médicos que su hija había ingerido la sustancia que se usa para destapar cañerías, aunque no se especificaron las circunstancias. Por el momento, no se conocen los detalles sobre cómo se produjo el hecho y la Policía santiagueña avanza en la investigación del caso.

Según el diario El Liberal, la menor quedó internada en el centro de salud, en un estado “desesperante”. La médica Noelia Arias comentó a las autoridades policiales que la pequeña presenta lesiones graves.

“El ácido es muy potente porque tiene la capacidad de degradar todo lo orgánico. Produce una alteración sobre las proteínas de los tejidos que hace que se produzca una quemadura de mucha gravedad en la boca, la garganta, el esófago y el estómago e incluso puede causar perforación. Es muy frecuente el error de diluirlo en otras botellas y termine en un accidente doméstico”, declaró el Jefe de Toxicología del Hospital, Fernández Carlos Damin, en diálogo con C5N.

También, alertó que en un niño aún es más grave, dadas sus dimensiones y que no hay que producir vomito porque eso puede perjudicar más a los órganos. El Jefe de Toxicología sugirió administrarles líquidos bien fríos e ir al hospital más cercano.

El ácido muriático puede causar irritación y quemaduras a las vías respiratorias, los pulmones, la piel, ojos y aparato digestivo. En caso de tener contacto con los ojos, puede causar daño permanente a la vista.