La senadora nacional por Tucumán Sandra Mendoza fue una de las que más repercusiones generó durante la sesión a partir de su discurso.

Sin embargo, los motivos de tal trascendencia no fueron las críticas hacia la oposición o su defensa de la gestión nacional, sino un yerro que no pasó desapercibido. 

Acuerdo con el FMI: "Nos abre una posibilidad dentro de la encerrona trágica que nos dejaron", afirmó Mendoza

En un tramo de su alocución, la dirigente peronista de Famaillá se refirió a la presencia del Fondo Monetario Internacional (FMI) y a la deuda pública como una espada de "dómacle". La senadora tucumana quiso apoyarse en la tradicional frase la espada de Damocles, que se remonta a Roma.

Según la tradición, que confirma Cicerón, el tirano cedió a Damocles -quien elogiaba continuamente a Dionisio- el trono por un día, pero hizo pender sobre su cabeza una espada que se sostenía únicamente por una crin de caballo. De ese modo, pretendía demostrarle lo precario de la prosperidad del tirano.

Sin Cristina en el Congreso, el Gobierno consiguió el aval para refinanciar la deuda con el FMI

Más allá de ese momento, Mendoza expresó sus fundamentos en la Cámara Alta para acompañar el acuerdo con el FMI.