“Vino a casa y empeñó el celular. Lo vengo a entregar porque me parece que lo robaron”, dijo O.P, el hombre que se transformó en el testigo clave en el esclarecimiento del asalto que sufrió un no vidente el viernes en Alderetes. Por otra parte, el presunto autor del ataque, que será acusado formalmente de robo doblemente agravado por haberse aprovechado de la situación de indefensión de la víctima, fue detenido ayer por personal de la Brigada de Investigación Este.

Ya recuperó su celular, el joven no vidente asaltado el viernes

El caso se registró cuando Adrián Bautista (29) caminaba por el barrio Rincón del Este. Fue interceptado por dos motochorros. Después de amenazarlo, le quitaron el celular y huyeron. El violento asalto fue filmado por una cámara de seguridad de un particular y rápidamente viralizado.

Detuvieron a un motochorro por robarle el celular a un no vidente

Personal de la Brigada Este analizó las imágenes, logró identificar a los autores y averiguó dónde vivían. Presentaron las evidencias al fiscal Diego López Ávila, que solicitó una orden para allanar las casas de los sospechosos. Una comisión policial, al mando de los comisarios Raúl Herrera, Ariel Santillán y Jorge Dib, realizó las medidas y secuestró la ropa que habrían utilizado en el asalto. Sólo lograron demorar a un tal “Maxi” que, por orden del secretario Guillermo Taylor, quedó aprehendido. El acusado, según confirmaron fuentes judiciales, podría tener numerosos antecedentes, la mayoría de ellos de delitos contra la propiedad.

Video: motochorros asaltaron a un joven no vidente que volvía del trabajo a su casa, en Tucumán

“Una de las sorpresas que nos llevamos es que la moto que había sido utilizada, a simple vista parecía haber sido pintada hace muy poco. Conseguimos la opinión de un especialista que confirmó nuestras sospechas. Evidentemente, al darse cuenta que habían sido grabados por una cámara, intentaron despistar cambiando la apariencia del rodado que utilizaron para cometer el ilícito”, explicó López Ávila.

Explicaciones

Mientras los investigadores realizaban el procedimiento, en la comisaría de Alderetes se presentó un joven de 26 años con un celular. Habría declarado que él se dedica a recibir objetos de terceros a los que les entrega una suma de dinero. Cuando le devuelven el dinero, él les entrega el objeto que han empeñado. Luego explicó que “Maxi” se presentó el sábado por la tarde a su domicilio con un Samsung S20 para realizar esa operación. “El teléfono estaba funcionando correctamente y estaba desbloqueado por lo que no sospeché que haya sido robado. Es más, cuando me enteré que podría haber sido de ese chico, inmediatamente vine a entregarlo”, habría declarado el hombre que pasó a ser testigo clave en la investigación.

“Los ciegos estamos expuestos a los autos y a la inseguridad”

López Ávila aclaró que esta es una actividad que está creciendo en los barrios. “Hay varios ejemplos: hace no mucho tiempo secuestramos una importante cantidad de ruedas de gomerías cuyos propietarios no pudieron justificar su procedencia. Lo mismo sucedió con el hombre que recibía las joyas que supuestamente robaba a la banda que se dedicaba a cometer escruches”, agregó.

“Roza lo ilegal”

En este caso no hubo delito porque el tenedor lo presentó ante las autoridades”, señaló. “De todas maneras, no deja de ser una actividad que roza lo ilegal y que se la está persiguiendo”, añadió.

Los vecinos de Alderetes celebraron la detención de uno de los acusados del robo. “Ahora hay que esperar que no lo suelten. Estas personas no tienen perdón de Dios. Es una vergüenza lo que hicieron: robarle un celular a un no vidente es algo inhumano”, expresó Julio Heredia. “Mucha gente en esta ciudad se mata trabajando para llegar a tener lo mínimo e indispensable para sobrevivir. Pero están estas plagas que lo arruinan todo robándote tu esfuerzo. Necesitan un castigo para que aprendan en serio”, concluyó María Laura Fernández.