“Volver a empezar, que no termina el juego, volver a empezar que no se apague el fuego. Queda mucho por andar y que mañana será un día nuevo”. Dos estrofas de la canción que hizo famosa Alejandro Lerner le calzan perfecto al momento de San Martín. La ilusión de quedarse con el primer ascenso se le esfumó de las manos, pero no todo está perdido.

Está claro que el camino que deberá recorrer no es el más sencillo. No haber ganado el juego contra Tigre lo hizo “retroceder” algunos casilleros y lo que parecía estar tan sólo a dos pasos hoy está a cinco.

El desafío es complicado; mucho más teniendo en cuenta que en el primer mano a mano, enfrente estará el encumbrado Ferro dirigido por Favio Orsi y Sergio Gómez, entrenadores que conocen bien los pasillos de La Ciudadela y al actual plantel “santo”. Pero tampoco resulta ser una misión imposible.

Tras el cimbronazo, el plantel pasó la noche en el hotel y ayer retomó las prácticas pensando en levantarse rápido. Y para eso será clave el trabajo mental, anímico y el futbolístico, claro.

Si San Martín no logró superar a Tigre en el duelo en el que más necesitaba una victoria, fue porque repitió varios errores que habían aparecido a cuenta gotas durante el último tiempo y que quedaron expuestos por culpa de la jerarquía del rival de turno.

El flojo nivel que vienen mostrando los encargados de generar juego es alarmante. Contra Tigre, Quilmes, Agropecuario y Deportivo Maipú, al “Santo” le faltaron luces de mitad de cancha hacia adelante. En Mendoza ganó gracias a dos errores rivales, a Agropecuario con una jugada de balón detenido, al “Cervecero” no lo pudo quebrar y contra el “Matador” cayó feo, en el golpe más doloroso.

Además, justo en el partido en el que no debía hacerlo, perdió los estribos y dejó de lado esa idea clara y precisa que le había permitido escalar en las posiciones de manera asombrosa. El juego fluido no apareció casi nunca y cuando el partido comenzó a hacerse cuesta arriba, abusó del pelotazo frontal; lo que terminó haciendo sencilla la tarea de los defensores rivales. Para colmo, los relevos no le aportaron soluciones y así, el combo fatídico fue tomando forma.

Como contrapartida, los que jugaron luego de mucho tiempo rindieron. Maximiliano Martínez y Santiago Gallucci Otero tuvieron un rendimiento aceptable y dejaron en claro que pueden aportar a la causa.

Eso sí, hoy mismo San Martín debe hacer borrón y cuenta nueva. El golpe debe servirle para hacerlo despertar. Con esto debe abrir bien los ojos y apuntar a apuntalar lo bueno y modificar lo malo; porque le queda una sola bala y deberá aprovecharla al máximo.

Lo principal será tratar de que algunos jugadores que fueron clave en la temporada, recuperen su mejor versión. San Martín necesita mucho de Juan Imbert, de Ariel Chaves, de “Tino” Costa y de Leandro Vella. Cuando ellos están bien, el equipo juega a otra cosa. Y cuando eso sucede, genera muchas situaciones sobre el arco enemigo.

La contundencia es otro detalle a pulir. En este tipo de instancias, es algo crucial. La diferencia con Tigre estuvo en que sus delanteros aprovecharon las que tuvieron, y San Martín no.

Queda tiempo para corregir lo que se hizo mal y para aprender la lección. El lunes el “Santo” debe ponerse de pie, como sea, a como dé lugar. Un triunfo en el primer “chico” del Reducido le hará recuperar la confianza, algo esencial para aspirar a grandes cosas. Pero para eso es indispensable no volver a cometer los errores que lo dejaron en las puertas del duelo decisivo.

Vivieron el duelo desde la platea y sufrieron por partida doble

“Que los hinchas confíen en nosotros, que crean. Hay material para creer”. Rodrigo Herrera no baja los brazos pese al duro golpe. Levanta la mirada, le pone el pecho a la difícil situación y pide seguir apostando fuerte.

Junto con Lucas Diarte y Matías Ballini vivieron el duelo desde afuera y sufrieron por partida doble. A la carga emocional normal de un partido se le sumó el ingrediente de estar lejos del juego, sin poder aportar para mejorar la situación.

“Me puso triste todo. El ambiente, lo que nos jugábamos, haberme perdido un partido de esta magnitud y el resultado. Pero bueno, ya está, ya pasó. No podemos lamentarnos, hay que seguir”, dijo el volante central, que de un tiempo a esta parte se transformó en una pieza clave del equipo. “Hay que estar convencido de lo que tenemos. No hay que regalar nada, jugar con todo y ojalá que se vengan grandes cosas”, sentenció.

Ballini fue otro de los que sufrió sobremanera. “Viví el partido con muchos nervios, alentando con buena energía a mis compañeros. Con Ferro tenemos una nueva oportunidad y espero ser parte”, dijo el volante, que no pudo estar a disposición del cuerpo técnico debido a un edema muscular en uno de sus gemelos. “Tenemos que dar vuelta la página rápidamente. Seguir mentalizados y con las mismas ilusiones que tuvimos desde el primer día. Sigo confiando a muerte en mis compañeros y en este cuerpo técnico”, afirmó el ex Rosario Central y Colón, entre otros equipos, quien fuera clave para que el “Santo” haya llegado con chances concretas a la última fecha de la fase regular.

El “Verde” de Caballito tiene algunas caras conocidas en La Ciudadela. La dupla Favio Orsi-Sergio Gómez (armaron el actual plantel “santo”) Gonzalo Rodríguez (jugó en el club hasta junio pasado) y Claudio Mosca son los futbolistas con pasado en Tucumán. Pero “Bayo” pide no pensar en eso. “Son rivales; tenemos que tomarlo así. No importa a quién tengamos enfrente. Tenemos que salir a ganar contra todos y en cualquier cancha; como siempre lo hicimos”, remató.

RINCÓN "SANTO"

No hay descanso

El plantel retomó los entrenamientos ayer por la mañana en el estadio. Hoy, en el complejo “Natalio Mirkin”, Pablo De Muner y compañía comenzarán a trabajar de cara al primer juego contra Ferro por los cuartos de final del Reducido. El entrenador deberá corregir errores y tratar de encontrar el mejor equipo de cara a los “mata-mata”.

Una socia especial

En el entretiempo del duelo del lunes en La Ciudadela, la CD reconoció a María Yuliana Meheris, quien se trasformó en la socia número 10.000 del club. El número de asociados es cada vez mayor.

Vigliano, el juez

Ayer quedó confirmado que Mauro Vigliano será el árbitro del primer juego contra el “Verdolaga”, previsto para el lunes desde las 19.05, el cual será televisado por TyC Sports. La última vez que dirigió al “Santo” fue el día en que se consumó el descenso a la Primera Nacional: derrota 1-4 con Boca en La Ciudadela.

Los seguirán de cerca

Ariel Chaves no jugó con Tigre por un problema en sus isquiotibiales; Matías Ballini no lo hizo por un edema en uno sus gemelos. Además, Emanuel Cuevas, Hernán Lopes y Hernán Pellerano terminaron el duelo del lunes con diferentes dolencias. A todos les realizarán estudios para determinar el grado de sus lesiones.

Otro lunes lleno de fútbol

Se confirmó que Tigre y Barracas Central dirimirán el primer ascenso, el lunes desde las 21.10 en cancha de Arsenal con el arbitraje de Patricio Loustau. Los otros juegos del Reducido también serán también el lunes: desde las 17, Independiente Rivadavia-Almirante Brown (Yael Falcón Pérez) y desde las 19.15, Deportivo Morón-Quilmes (Darío Herrera).