Toda ausencia se torna perceptible cuando está investida de valor para algún grupo que asume la falta y actúa en pro de enmendarla.

Si bien cada uno de los proyectos editoriales, que reeditarán los textos de Perrone, presenta sus particularidades, ambos ponderan el reposicionamiento de un autor cuya circulación ha sido esporádica desde su emergencia hasta el presente, pero que habita en la memoria de cierta comunidad de lectores y cuyo rumor se propaga con tal eficacia que enciende el deseo en nuevas camadas de lectores. La figura de Perrone goza –quizás como pocos escritores tucumanos de la segunda mitad del siglo XX– de un alto grado de mitificación. Tan es así que novelas escasamente leídas como La jauría o Los espermatozoides del diablo (inédita) refuerzan el halo espectral de su figura y de la de sus lectores, a quienes el mito alcanza y modifica.

Estas valoraciones se alimentan por la imbricación de su trama biográfica en la escritura. Inscripto en la tradición de “malditos”, Perrone es considerado –al mismo tiempo– como un escritor de culto y como un escritor resistido –otra vez el juego de simultaneidades. Su propuesta estética, corrosiva de ciertos modos de comprender lo literario, se regodea en la marginalidad aunque no lo hace conforme a las preceptivas del realismo tradicional sino, más bien, desde un realismo torcido. Devenida en una especie de picaresca rabiosa, la literatura perroneana propicia, a través de la risa sardónica y del golpe de efecto, una fuerte crítica a las farsas de verdad urdidas desde el poder.

La presencia de sujetos al margen de la Ley, de la Sociedad y de la Lengua (por mencionar algunas instituciones modelizadoras) construye un nuevo movimiento especular: ¿qué mira la sociedad cuando enfoca la marginalidad sino una imagen de sí misma? Entonces, a ese universo pleno de legitimidades Perrone le devuelve otredades incómodas que fundan legalidades paralelas. De alguna manera, su escritura desbarre la mugre silenciosa de debajo de la alfombra social y la ostenta con crudeza y con cinismo.

La editorial La Papa publica un volumen que reúne tres novelas del autor: Preso común, Visita, Francesa y completo y Días de reír, días de llorar. La Trilogía cuenta con prólogo y edición al cuidado de Martín Aguierrez, colaboraciones de Maximiliano Cárdenas y de Verónica Juliano y fotos de Peri Azar. Falta Envido Ediciones organiza su serie homenaje en cuatro tiempos, replicando un gesto de reminiscencias folletinescas: 1° Entrega: Preso común; 2° Entrega: Visita francesa y completo; 3° Entrega: Días de reír, días de llorar; 4° Entrega: Los pájaros van a morir a Buenos Aires.

Toda decisión de publicación, en este caso de reedición, constituye una acción política de impacto en la vida cultural de una sociedad. Así, la comunidad lectora tendrá la oportunidad –parafraseando unos versos de Ariadna Chaves– de beber del agua sin olvidar la fuente y ejercer su plena soberanía a la hora de recibir, acoger o rechazar, esta propuesta literaria irreverente y polémica que se disputa un lugar de reconocimiento en nuestra vasta y heterogénea cartografía literaria.

© LA GACETA

Verónica Juliano - Doctora en

Letras. Profesora de Literatura

Argentina I y Literatura Argentina

del NOA en la UNT.