Por primera vez desde que hay memoria, la Justicia penal local juzgará una supuesta defraudación de derechos de fiduciantes en fideicomisos inmobiliarios en perjuicio de al menos 19 clientes y unas presuntas amenazas coactivas. El juicio oral del empresario Otto Fernando Barenbreuker (h -foto-) comenzará el 19 de abril próximo, según dispuso Eduardo Romero Lascano, juez de la Sala II de la vieja Cámara Penal de esta capital, en una audiencia virtual convocada para ordenar el proceso. El tribunal del debate incluiría al vocal mencionado, a Stella Maris Arce y a Emilio Páez de la Torre.

“Yo creo en el poder de resolver en el acto”, dijo a modo de introducción Romero Lascano, quien estuvo muy locuaz: cruzó bromas y alabanzas con los abogados, y hasta se definió como “amigo de los fiscales y no tan amigo de los defensores”. Con el auxilio del secretario Gonzalo Ascárate, el juez reactivó un proceso de interés público que estaba suspendido con el argumento de que faltaba digitalizar la documentación. La causa había sido abierta a prueba el 11 de noviembre por orden de Arce, pero el Ministerio Público Fiscal que representó Estela Velia Giffoniello no había ofrecido evidencias, tampoco el defensor de Barenbreuker, Carlos Varela Soria, quien advirtió que no lo habían notificado. Sólo el querellante Juan Roberto Robles había hecho la oferta.

“Queremos ir a juicio lo antes posible. Llevamos demasiados años esperando. El primer hecho es de 2016”, expresó Robles y propuso que el fiscal Carlos Saltor, que ya había participado en la causa, reemplazara a Giffoniello. Varela Soria, por su parte, solicitó que continuara la fiscala y que le otorgaran el plazo de seis días hábiles para ofertar las pruebas. Giffoniello dijo que había que consultar a Saltor (si deseaba involucrarse en el juicio) y, si bien concedió que el conflicto era complejo, aconsejó solucionarlo cuanto antes.

Ante este panorama, Romero Lascano resolvió reanudar los plazos desde el propio 3 de marzo. “No quisiera que me sepulten con prueba. Estoy familiarizado con el tema (del fideicomiso) porque enseño Derecho Comercial en dos universidades y esta fue mi materia en el exterior. Abramos a prueba: que haya seis días para todos”, apuntó. Además, propuso “imprimir un momentum” al caso, y filtrar la prueba superflua e inconducente en otra audiencia programada para hoy a las 12. “Les tengo un regalito: los voy a largar preocupados. Vamos a ver... vamos a ver... El 19 de abril, ¿cómo lo ve, secretario?”, consultó el juez. Ascárate le respondió que era el Día de San Expedito y que recién había tiempo en la agenda para agosto. “No, no, agosto no. Vamos a trabajar en doble jornada a partir del 19 de abril. Y en una semana liquidamos el juicio”, pronosticó Romero Lascano.