Cambia, todo cambia. Los años pasan, la tecnología avanza y los modos de vivir se modifican. Al deporte se lo vivió, se lo vive y, probablemente, se lo vivirá. Pero de distintas maneras. Lo que en un momento fue la radio, después lo fue la televisión. Hace algunos años que internet, las aplicaciones y las transmisiones vía internet (o streaming) llegaron para pelearles a los “dinosaurios”. Los antiguos “salvavidas” para ver los partidos y competencias cuando ir a la cancha no era posible por diferentes maneras, no están obsoletos: hay adeptos que eligen sentarse frente a la radio (fiel amiga de quienes pasan mucho tiempo en la calle: los taxistas, por ejemplo), y otros que son seguidores de la televisión.

Hay un grupo que queda fuera del recuento: el equipo que hace de las nuevas tecnologías, su mejor arma. En algunos casos, esta elección está ligada a cuestiones generacionales; en otras, a simple preferencia. Y es por eso, que las redes sociales se ponen novedosas para atraer a su público fiel, y a nuevos seguidores que busquen otras comodidades. Facebook es una de las gigantes que avanza a pasos veloces: una de sus últimas apuestas va dirigida exclusivamente a los fanáticos del fútbol sudamericano. El convenio que firmó hace unos meses la red social de Mark Zuckerberg con la Conmebol, entrega la posibilidad de ver la transmisión de algunos partidos de esta edición de la Copa Libertadores y las de los próximos tres años. Una propuesta que, por un lado, sirve de anzuelo para vincular el deporte con la red social, y, por otro lado, sale al mercado para competir con aplicaciones clásicas en lo audiovisual como YouTube; con otras que comienzan a abandonar los textos para apostar por la imagen dinámica, como Twitter; y hasta con algunas que originariamente provienen de mercados completamente diferentes al del deporte o al de las transmisiones, como Amazon. Netflix, en cambio, es otra “página” de esta puja por liderar las nuevas formas de vivir el deporte.

Esto será posible a través de Facebook Watch, una función de la red social que se puso a prueba en Estados Unidos hace un año y que extendió su funcionamiento para el resto del mundo recién en agosto del año pasado.

Esta no es la primera apuesta de Facebook de este tipo: transmitió la Champions League para Latinoamérica, además de haber incursionado en su país de origen con deportes característicos de la potencia estadounidense, como el béisbol. La alternativa de ver los partidos que definirán al próximo campeón de América, es totalmente gratis. Sólo basta con tener descargada la aplicación de la red social y, con seguir a la página de la entidad madre del fútbol sudamericano, bastará para ver acción.

Independientemente del medio, es transmisión al fin. Llevar a cada hogar, o cada dispositivo tecnológico la competencia del momento, no tiene un precio que pase desapercibido. Por un lado, las cadenas o empresas interesadas en la transmisión, deben hacerse de los derechos correspondientes. Por el lado de los usuarios, algunas plataformas obligan a pagar una suscripción mensual para acceder a esos contenidos. Pero si se comparan esos precios con lo que puede llegar a costar una entrada para ver los partidos en directo, desde la cancha (depende de la competencia y el lugar), en algunos casos, la posibilidad de ver los eventos deportivos desde casa, se vuelve una opción bastante favorable para la economía de cada uno. Los tiempos cambian y el deporte perdura, pero con el avance de la tecnología, la forma de alentar parece haber entrado a full en el terreno de las modificaciones. Habrá que adaptarse a la nueva era.

No sigue modas: se mantiene al margen de la competencia

Netflix no será competencia directa para Facebook. La principal aplicación de películas y series no tiene interés  en sumar las transmisiones deportivas a su catálogo y es una postura que mantiene desde hace algunos años.  “Nunca hay que decir nunca, pero no hay planes de eso”, afirmó María Ferreras, vicepresidenta de desarrollo de negocios de Netflix EMEA (siglas en inglés de Europa, Medio Oriente y África), en una convención en Amsterdam, Holanda,  hace cuatro meses.  Esta plataforma de contenidos no encuentra favorable la incursión en las transmisiones en vivo: por un lado, desde Netflix consideran que no podrían brindar un contenido distinto al que ya entregan otras empresas en este ámbito; por otro lado, la retransmisión de partidos en directo tiene un costo importante y aún más cuando los derechos y contenidos tienen que ser adquiridos país por país en lugar de manera universal. Volver a ver un partido no es fiable para la plataforma, porque las posibilidades disminuyen con cada minuto de terminada la competencia. Esto se relaciona con los contenido que maneja: apuesta por materiales grabados (propios y ajenos)  que no pierden interés con el tiempo. La plataforma, apunta a la permanencia. Aun así, incorpora el deporte a su manera  a través de películas y documentales: Boca, Chapecoense, Juventus, Luciana Aymar y Muhammad Ali  son sólo algunos de los protagonistas.

El cambio dejó en segundo plano a los caracteres

Si de redes sociales se habla, Twitter no quiere quedarse afuera de las novedades. Ya incursionó en 2017 con la firma de un acuerdo con la NFL de fútbol americano para acceder a la transmisión de 10 partidos vía Periscope (la aplicación de Twitter para realizar videos en vivo). Facebook, Amazon y YouTube fueron, nada más ni nada menos, que el resto de los interesados en la firma que se llevó la red social del pajarito por 10 millones de dólares, según el sitio web Recode. Pero mientras la última apuesta de Facebook está en el fútbol, Twitter hace lo mismo en el básquet. La red social de los 280 caracteres firmó hace apenas unos días un convenio con la NBA con una particularidad: sólo transmitirá un fragmento de los partidos. Durante la primera mitad del cotejo, los seguidores podrán votar en la red social cual será el jugador a seguir con las cámaras durante el tiempo que dure la transmisión de Twitter. En caso de que el elegido vaya al banco de suplentes, las cámaras se quedarán con un plano general pero desde el tablero. Una apuesta innovadora para atraer fanáticos del streaming y del básquet.  “Lo rápido que cambian las cosas en los partidos de la NBA es una de las razones por las que funciona tan bien en Twitter”, reconoció Jack Dorsey, cofundador y director general de Twitter, en una reunión que mantuvo con Adam Silver, comisionado de la NBA.  “Hay una audiencia joven que no se suscribe a la televisión paga, pero que consume mucha NBA”, admitió Silver.

De un mercado a otro

Algunos competidores no se bajan de la carrera tecnológica. Quien en esta ocasión parece estar dispuesto a continuar invirtiendo más allá de los costos que esto implica, es Amazon.

Con Amazon Prime Video, la compañía que se inició como una empresa de comercio electrónico en Washington, Estados Unidos, apuesta por competir con Netflix en la producción de contenido audiovisual propio y adquirido, en el que también incluye películas y documentales deportivos;  pero además, ahora será rival de Facebook: también apostó por las transmisiones en vivo no sólo de fútbol sino también de otras disciplinas de gran convocatoria. Quienes la consideran una buena oferta para contenidos audiovisuales, y quieran acceder a estos contenidos, deberán desembolsar un monto mensual con un sistema de pago similar al que utiliza Netflix.

Ya conoce el campo de juego

YouTube no se conforma con ser la principal plataforma de videos en el mundo. La perteneciente a Google ofrece infinidad de contenidos audiovisuales que pueden ser subidos por los propios usuarios: goles, partidos completos y hasta entrevistas, dentro del deporte. También ofrece desde hace varios años la posibilidad de acceder a videos en su categoría “en vivo”.

Pero en la carrera por adueñarse de los fanáticos de la televisión, la plataforma de videos incorporó hace menos de un año YouTube TV. Esta opción de televisión por streaming, que continúa incorporando canales a su lista, tiene un costo que varía según el país, el paquete elegido y los servicios adicionales que ofrece. Además, permite grabar los contenidos para ser vistos nuevamente, y tener acceso a seis cuentas (tres de ellas, en forma simultánea).

Continúan en carrera

Otros canales y páginas de internet, también ofrecen partidos  por streaming. Algunos de manera clandestina, mientras que otros brindan un servicio pago. En los primeros, entra en juego la calidad de la transmisión; en los segundos, los precios, que varían sustancialmente entre un servidor y otro. Algunas de esas webs pertenecen a las propias confederaciones y federaciones de los distintos deportes, que buscan acercar a sus seguidores la competencia de turno. El ejemplo más reciente es la FIH (Federación Internacional de Hockey): anunció la creación de  “FIH.Live”, la plataforma que reunirá a los amantes del hockey. Este sitio, que se espera que sea lanzado la próxima semana, ofrece la posibilidad de ver los principales eventos internacionales. La publicidad será el primer modo de sustento, que después podría recurrir a una suscripción mensual por parte de los usuarios.  

Facebook Watch

1. En Argentina, Bolivia, Chile, Colombia, Ecuador, Paraguay, Perú, Uruguay y Venezuela, el acuerdo entre Facebook y la Conmebol, incluye la transmisión de 46 partidos por año.

2. Del total de los partidos acordados, 27 de ellos se transmitirán exclusivamente en Facebook Watch todos los jueves. Los 19 restantes se transmitirán los martes y miércoles, en Facebook Watch, pero en simultáneo con otros medios.

3. Esta función de la red social de Mark Zuckerberg también incluirá resúmenes y destaques de los partidos, además de otros contenidos digitales a los que podrán acceder los fanáticos.