El presidente Mauricio Macri verá por televisión en la Residencia de Olivos o en su quinta familiar la final entre River Plate y Boca Juniors por la Copa Libertadores, que se juega en Madrid el próximo domingo, ya que tiene previsto regresar ese día a la mañana, tras un descanso en Neuquén.

Macri, su esposa, Juliana Awada, y su hija Antonia descansan desde la noche del miércoles último en la villa turística de Chapelco, en las proximidades de San Martín de los Andes, en Neuquén.

Boca y River prueban variantes pero no definen a los titulares

Las fuentes no supieron precisar si seguirá las alternativas del partido en el estadio Santiago Bernabéu, del Real Madrid, desde la residencia presidencial de Olivos o en su quinta privada Los Abrojos, en Malvinas Argentinas, en el conurbano bonaerense. "Eso no lo decidió aún, recién el domingo se sabrá", dijeron los informantes a Télam.

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Macri, quien arribó el miércoles pasado a Chapelco, procedente de Córdoba, donde presentó los nuevos aviones Pampa, fue presidente de Boca entre 1995 y 2007, lapso que resultó el más provechoso en títulos de la institución "xeneize", ya que consiguió más lauros que el recordado Alberto J. Armando (17, 11 de ellos internacionales).

La revancha de la final por la Copa Libertadores entre River y Boca arrancará el domingo, a las 16.30, hora de la Argentina, tras la postergación del 24 de noviembre pasado, a raíz de las agresiones al micro del plantel boquense.