BUENOS AIRES (por Marcelo Androetto, especial para LG Deportiva).- Racing llega mejor a la cita estelar del miércoles por Copa Libertadores. River lo ratificó anoche en el Monumental ante Argentinos Juniors, en su cuarto empate consecutivo 0-0 entre la Superliga y el partido de ida frente a la “Academia”. Cuatro partidos sin convertir es demasiado. Al River de Marcelo Gallardo no solo lo aquejan las lesiones en serie y el affaire Zuculini, sino también y, principalmente, una sequía goleadora fuera de lo común.

Fue la remake de una semana atrás ante Belgrano. En el primer tiempo, el River que abunda en mediocampistas de buen pie y delantero único se diluyó una y otra vez al pisar el área. Con un “Nacho” Fernández más activo e incisivo que en el pasado reciente, el “Millo” mostró juego asociado, pero careció de profundidad ante un Argentinos sin complejos. Para peor, Pratto volvió a demostrar que pivotea bien pero define de terror. Otra vez el “Tucu” Palacios se quedó en el vestuario en el entretiempo, nuevamente Gallardo recurrió a Borré para intentar paliar el “mal de goles”. Llegaron algunas ocasiones claras, en particular un cabezazo de Pratto que dio en el travesaño y un tiro libre de Quintero salvado en gran forma por el arquero Cháves, la figura.

Argentinos también tuvo la suya, pero Pinola evitó sobre la línea (con la colaboración del travesaño) que Armani viera malogrado su invicto, ahora de 890’, en el torneo local, cada más cerca de la histórica marca de Barisio (1075’).

Lo escrito: en la previa de Racing, Gallardo y todo River siguen repletos de interrogantes.