¿Quién puede dudar de que la vida está hecha de momentos? Maximiliano Bestani, hoy convertido en el piloto tucumano de categorías pisteras mejor perfilado en aquello de luchar por un título, vive “su” momento. Pero lo hace con calma, consciente de que también puede perderlo todo en una carrera. Igual, nadie puede quitarle mérito. “Tengo objetivos pendientes, como ganar una competencia. Ya conseguí varios podios, tres este año. Y si bien siento que es algo que no me imaginaba -y bienvenido sea-, lo otro, un triunfo, es una necesidad. De todas maneras, estar 2° en el certamen de la Clase 2 del Turismo Nacional no es fácil. Sé que mi temporada es buena. Me gusta lo que estoy viviendo, me impulsa a ser cada día más profesional en lo que estoy haciendo”, dice con seguridad el piloto del Renault Clio del GR Competición.

- ¿Te incomoda no haber ganado todavía en la categoría?

- No me molesta no haber logrado un triunfo aún. No me vuelve loco. No siento esa presión. Trato de sacarme ese sentimiento, porque me incomoda, es como si llevara un lastre.

- ¿Y cómo pensás seguir este camino empinado?

- Así como aspiro ganar una carrera, mi pretensión es convertirme en el N°1 al final de la temporada. Lo estoy buscando con calma, aunque algo de intranquilidad sentiré hasta que lo consiga. Mi primera mitad de año fue lo mejor de mi carrera deportiva. Igual, si hoy terminara el torneo, no me sentiría mal si fuera el N°2, como lo soy ahora en el certamen. Igual, en las próximas carreras, además de buscar la victoria, un objetivo es terminar siempre adelante de Nicolás Posco, el puntero.

- ¿Por qué pensás que no ganaste todavía?

- Las carreras son largas, así como los fines de semana de competencia tienen muchas cosas. Tuve oportunidad de ganar, pero... a veces fallé yo, o la estrategia, o el auto. Fue un poco de todo. Sí soy consciente de mi capacidad de adaptación al momento de cada carrera: si el auto está para salir 10°, no me vuelvo loco. Pero al mismo tiempo siempre busco lo mejor. Tampoco es cuestión de salir a chocar rivales, o de recibir sanciones por cosas incorrectas que uno haga en pista. De eso sé, porque las sufrí en su momento y aprendí de la experiencia.

“Maxi” dice estar ganando aplomo. Que su ingeniero de pista (Rafael Croceri) le ayuda mucho para resolver ciertas situaciones de competencia. Por caso, el fin de semana en Las Termas sucedió que, si no lo hubiera calmado por la radio, quizás nunca lo hubiera pasado a Posco. El piloto de 26 años también le asigna parte importante en su tranquilidad el sostén que le brinda el psicólogo Martín Lix Klett. “Voy a sesiones porque me hace bien. Él trata de ordenarme en la vida, de hacerme pensar de otra manera, sobre todo en aquello en lo que creo que tengo la razón y no es así. Trabajo mucho el tema de las presiones.”

- ¿En qué pensás estar logrando hacer una diferencia?

- Me ayuda mucho trabajar la parte física, con Leandro Baigorria Vega. Estar bien en eso impide cometer errores en partes complicadas de una carrera, como cuando está terminando. En años anteriores, eso me pasó factura, porque perdía lucidez.

- ¿Hay alguna ventaja que le estés dando a los rivales?

- Quizás dé ventajas en la parte técnica. No tengo el trainning que tienen otros pilotos que corren en varias categorías o efectúan pruebas previo a cada fecha, algo que yo no puedo por los costos. Me encantaría poder probar con el Renault Clio. Y también subirme al Nissan March que me armó el equipo para ver de qué se trata. Quizás tenga que verlo como una inversión. Por otro lado, ahora vienen tres carreras en 45 días, lo cual será una alta exigencia.

- ¿Cómo estás manejando el hecho de que el público tucumano fanático del automovilismo tiene su foco en lo que hacés?

- Noto que mucha gente está más atenta a lo que hago. Y eso sucede en la calle o en las redes sociales. Pienso que les gusta lo que estoy haciendo. Recibo ese afecto día a día, es algo muy lindo que me agrada mucho. Por mi parte, quisiera llevarles felicidad en forma de resultados. Pero a la gente también trato de devolverle algo de tanto afecto que me da. Más allá del contacto directo, me ayudan muchas las redes sociales. Les contesto a todos los mensajes que me envían, hago sorteos, regalo cosas. Nunca pensé que esto podría pasar, es nuevo para mí. A todos les agradezco de corazón.

- ¿Dónde creés que estás hoy?

- En el lugar en que se pelea un campeonato. Y estar allí me genera sensaciones indescriptibles. Sé que es un sitio en el que muchos pilotos quisieran estar. Yo lo estoy disfrutando.

-¿Qué es lo que te trajo a este presente?

- La perseverancia, la continuidad. Y con esa actitud está toda mi familia. Mis padres son parte fundamental de este proceso. Hubo momentos en que estaba por abandonar, pero el sostén que recibí de ellos me hizo continuar, aunque las cosas no salían bien.

-¿Cómo llegaste?

- Con mucho sacrificio. Esto me costó muchísimo. Siempre apuntando a ser y hacer lo mejor posible. En definitiva, enfocado siempre en el deporte.

-¿Por qué creés que llegaste?

- Porque seguí un camino. Elegí el correcto en los últimos años, acompañado por un buen equipo, con integrantes muy trabajadores.

- El cuando de tu vida deportiva, ¿es hoy o dentro de cinco fechas cuando termine el campeonato?

- Es hoy y también lo será en la última fecha. Pero reitero, no es algo que piense de tiempo completo: queda mucho por delante, se vienen carreras difíciles y situaciones que quizás uno no puede manejar. Pero me gustaría coronar este momento como campeón. Es algo que sueño desde chico.