Ellos se robaban las miradas en el sur de la provincia. Su crecimiento económico, reflejado en las lujosas viviendas que habrían adquirido en los últimos tiempos y en los vehículos de alta gama que utilizaban para trasladarse llamaba la atención. Intentaban despejar todas las sospechas asegurando que ese era el fruto del esfuerzo como productores agropecuarios o como transportistas. En realidad, esa habría sido una fachada, ya que en realidad se trataría de un grupo que estaba dedicado a la distribución de drogas en esta provincia, Catamarca y Santiago del Estero. Los integrantes de esta organización ya fueron condenados por comercialización de estupefacientes.

Los hermanos Juan Alberto “Bebote” y Amado Paradi y una mujer, cuya identidad aún no trascendió, fueron detenidos hace poco más de una semana en Concepción. Miguel Ángel Contreras, juez federal de Catamarca, había ordenado realizar allanamientos en las viviendas de los acusados de dirigir una banda que se dedicaba a trasladar marihuana a esa provincia. Encontraron poca cantidad de “yerba”, pero a los dos días ubicaron enterrados en una finca de Monteagudo unos 275 kilos de esa sustancia. Supuestamente, esa tierra había sido arrendada por los hermanos para cultivar, pero en realidad, la habrían utilizado como centro de acopio. El propietario del campo, de apellido Rivadeneira, aún no se presentó para demostrar su inocencia.

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Fuentes judiciales confirmaron que podría haber más personas implicadas en la causa, ya que se trata de una organización que contaba con una importante logística para poder operar. Por la cantidad de marihuana incautada, se sospecha que la banda podría haberla trasladado en avioneta desde el litoral luego de que haya sido ingresada por Paraguay. No se descarta además que hayan utilizado los vehículos de la empresa para trasladar la droga. Los investigadores también sospechan que, con el mismo sistema, traían cocaína desde localidades salteñas. Este indicio surgió luego de que en Santiago del Estero se secuestraran más de 20 kilos de droga.

Antecedentes

Los investigados son conocidos en Concepción por sus antecedentes. En la Justicia ordinaria “Bebote”, Amado y Maximiliano Paradi tienen varias causas abiertas por amenazas, pero en el listado también fueron acusados de hurtos de cosechas y de usurpación que, presumiblemente, se trataría de campos para realizar cosechas.

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Sus nombres se hicieron conocidos cuando fueron detenidos en 2009 por personal de la Dirección General de Drogas Peligrosas. Fueron acusados de haber montado una organización que vendía drogas a través del sistema de delivery, es decir, sus clientes llamaban por teléfono, pedían la dosis que querían y un miembro del grupo se las llevaba en un lugar determinado en motocicleta.

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Por este caso enfrentaron al Tribunal Oral Federal en 2011 “Bebote”, sus hermanos Amado y Maximiliano, su medio hermano Miguel Ángel “Murungo” Paz, su padre Juan Alberto Parodi y dos allegadas a la familia, Nancy Medina y Mónica Chávez.

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El juicio tuvo algunos ribetes sorpresivos. Por ejemplo, el padre de los ahora detenidos reconoció que la droga que encontraron en su casa era de su hijo Amado y que él no tenía nada que ver con la venta de estupefacientes. Él, al igual que las dos mujeres, fue absuelto por el beneficio de la duda. Mientras que los otros recibieron condenas de entre cuatro y cinco años, pero como habían permanecido dos años en la cárcel, recuperaron la libertad al poco tiempo.

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Los investigadores creen que los acusados nunca abandonaron la actividad. A “Bebote”, cuando estaba detenido en el penal de Concepción, se le encontró en su celda globos donde tenía oculta tizas de cocaína que, supuestamente, se las vendía a sus compañeros de encierro. Si bien es cierto que no hay confirmación al respecto, la organización liderada por los Paradi creció considerablemente luego de que se desarticulara las organizaciones que habrían sido lideradas por Carla “La Jefa” Sánchez y Julio “Gastonero” Chávez.