El vicegobernador, Osvaldo Jaldo, expresó sus condolencias frente al asesinato del policía Marcelo Ruesja, quien recibió disparo en la cabeza durante un robo, y se solidarizó con la familia del efectivo.

"Nos ponemos a disposición como Gobierno y también queremos decir que seguimos apoyando todo el accionar policial dentro del marco de la ley", afirmó el presidente de la Legislatura, quien desechó los rumores sobre un eventual acuartelamiento de los efectivos policiales: "cada uno está cumpliendo su rol, en su lugar, con las tareas que le corresponden y, más que siempre, hay que estar trabajando en la calle contra el delito".

Aprehendieron a dos sospechosos por la muerte del policía Ruesja

Jaldo indicó que, desde la Cámara, junto con sus miembros, continuará sancionando las leyes que sean necesarias para brindar mayor seguridad a los tucumanos y redobló la apuesta: "fundamentalmente endureciendo las leyes para que la Justicia las aplique y los delincuentes estén donde deben estar: presos".

Conmoción por la muerte de Ruesja: "en Tucumán, ser policía significa poner un pie en el cementerio"

"Apoyamos a la institución policial en estos momentos difíciles que está pasando. Este tipo de hechos no nos hará claudicar en nuestro accionar contra la delincuencia", enfatizó el compañero de fórmula del gobernador Juan Manzur.

El policía que murió anoche circulaba en una Yamaha 125 por la autopista sur, frente al parque Industrial. Dos ladrones a bordo de una moto dispararon contra él en la cabeza y a su esposa, Alejandra Farías, en la pierna izquierda. Los agresores se dieron a la fuga con el vehículo y con el arma reglamentaria del cabo.


El asesinato de Ruesja generó conmoción en la Policía, ya que es el tercer uniformado que muere en los tres meses que transcurrieron de 2018. En la madrugada del 13 de febrero, Cristian Peralta y Sergio González Páez fueron acribillados en el parque 9 de Julio. El principal sospechoso es Máximo Abraham, que fue capturado 10 días después del doble homicidio.
El asesinato de Ruesja generó conmoción en la Policía, ya que es el tercer uniformado que muere en los tres meses que transcurrieron de 2018. En la madrugada del 13 de febrero, Cristian Peralta y Sergio González Páez fueron acribillados en el parque 9 de Julio. El principal sospechoso es Máximo Abraham, que fue capturado 10 días después del doble homicidio.

Durante la madrugada, vecinos dieron aviso a la Policía sobre dos sujetos de Villa 9 de Julio que podrían haber tenido vinculación con el homicidio. Los uniformados los buscaron y ya en la comisaría les practicaron esta mañana el dermotest.