Agua, agua y más agua es lo que corre por el suelo norteño desde hace algunas semanas. Esto se debe a una zona frontal (el cruce de aire frío y caliente) que quedó estacionada en el NOA, según explicó Juan Minetti, titular del Laboratorio Climatológico Sudamericano.
El meteorólogo afirmó que, sólo en San Miguel de Tucumán, durante enero cayó casi el doble de agua de lo habitual. Específicamente llovieron 326,8 milímetros, mientras que lo normal para esta época del año es 187.
"Primero tuvimos un periodo seco que duró casi una quincena; las lluvias eran exiguas. Después empezó a llover y la mayor parte fue en la segunda mitad", manifestó Minetti en diálogo con LA GACETA.
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El meteorólogo detalló que en Termas de Río Hondo, en Tartagal y en la zona del aeropuerto tucumano hubo jornadas en las que las precipitaciones superaron los 100 milímetros en un día. "Hubo un paquete de lluvias muy importantes y puntuales, específicamente del 24 en adelante.
Qué se espera para febrero
Para alivio de quienes sufrieron las inclemencias climáticas -especialmente en el interior de la provincia-, Minetti indicó que en el mes que arranca será más caluroso que lluvioso. "Estará muy caluroso, con dos golpes de calor. Uno será antes de la mitad de febrero, y luego cerca de fin de mes", afirmó.