El costo de la Canasta Básica Alimentaria (CBA), que mide el nivel de ingresos que necesita percibir una familia tipo para no caer en la indigencia, aumentó durante el año pasado 21,7%, mientras que la Canasta Básica Total (CBT), que marca el umbral de la pobreza, subió 26,8% entre enero y diciembre pasados, según informó ayer el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec). De esta manera, una pareja con dos hijos de entre 6 y 8 años, necesitó en diciembre contar con ingresos por $ 6.644 para poder adquirir la Canasta Básica Alimentaria; mientras que el costo de la Canasta Básica Total cerró el año en $ 16.677.

El peso de las tarifas de los servicios resultó decisivo a la hora de marcar la diferencia entre ambas canastas ya que en diciembre, cuando se aplicaron subas a las tarifas de luz, y gas, la CBT aumentó 4,1% en relación a noviembre, mientras que la CBA avanzó 1,2% debido a que no mide la evolución de servicios regulados.

Según el Indec, con una inflación anual del 24,8% a lo largo de 2017, los precios de los bienes subieron 20,1% mientras que el de los servicios aumentaron 34,2%.