Una embarazada casi muere tras recibir una patada de su bebé. El golpe fue tan fuerte que rompió la pared del útero de la mamá, unos siete centímetros.

El increíble caso ocurrió en China. La mujer llegó al hospital quejándose del dolor y presentando altibajos en el pulso y la respiración. En una primera consulta, los médicos creyeron que era una situación corriente de rotura uterino pero la ecografía lanzó otra respuesta: el hueco en el útero era tan grande que la niña estaba atascada en los glúteos de su madre.

La patada puso en riesgo la vida tanto de la mujer como de la bebé que ya tenía 35 semanas de gestación. Por el tiempo, los médicos no dudaron en hacer una cesárea y sacar urgente a la niña, informó el sitio misionesonline.net. 

A pesar de los resultados, los especialistas no se quedaron con los brazos cruzados y siguieron investigando. Así fue que descubrieron que la mujer había tenido una reciente operación de extracción de fibromas de su vientre, lo que le dejó débil esa zona del útero.