El Día de la Madre no volverá a ser el mismo. No desde que el movimiento de Schoenstatt de Tucumán decidió coronar a la Virgen como reina y madre de todas las familias, justamente en vísperas de esa gran fiesta anual. La familia schoenstattiana se viene preparando desde hace dos años para este momento, el sábado 14, cuando todos los tucumanos, pertenezcan o no al movimiento, acudan al santuario “Jardín de María” de Villa Carmela (Tafí Viejo), para proclamar la coronación de María públicamente y también en el corazón de cada uno de los fieles católicos.

La coronación ya es una tradición entre las familias schoenstattianas. “Cada uno, en su hogar, acostumbra a nombrar a la Virgen Reina de las necesidades que uno tiene, incluso le ponemos una coronita en el cuadro que cada uno tenemos en la casa. Por ejemplo, si tenemos un hijo enfermo, la nombramos reina de la salud, si los chicos tienen dificultades en el colegio, la llamamos reina del estudio, si hay peleas entre hermanos, la declaramos reina de la armonía. Nosotros confiamos en Ella, que como reina y madre siempre buscará lo mejor para sus hijos”, explica con sencillez Lilian Pera de Haskour, quien junto con su marido, Antonio, participan de la obra familiar.

“La coronación de una imagen es una tradición de la Iglesia. Significa reconocer lo que hizo Jesús con su Madre, al coronarla en el Cielo como reina de todo lo creado. Los católicos lo hacemos al rezar el quinto misterio del rosario, donde conmemoramos a la Virgen como reina del cielo y de la tierra. Como ella es reina nosotros le suplicamos que se manifieste como intercesora con su inmenso poder ante alguna necesidad nuestra. Le pedimos que ella le pida al Padre por nosotros, como lo hizo en las Bodas de Caná, y que realice un milagro”, explica el padre Ludovico Tedeschi, asesor del movimiento de Schoenstatt de Tucumán y en todo el país.

“Pero no es un acto que se termina allí. La coronación debe formar parte de nuestra vida. También la debemos coronar en nuestras familias”, afirma Marcelo Rodríguez. Él y su esposa, Claudia, son coordinadores diocesanos del movimiento.

El matrimonio de Bernardo Méndez y su señora, Claudia Grellet; Benjamín Paz y los novios Agustina Pérez y Jorge Casagrande invitaron a todos los tucumanos a concurrir a la coronación. Pidieron que vayan con un cuadro o una estampita de la Virgen para que sean bendecidos en ese día de tanta gracia. También pueden llevar una coronita de cualquier material para colocarla sobre la estampa de manera simbólica.

Las familias del movimiento diseñaron entre todos una valiosa corona de oro llena de simbolismo con la que será investida la imagen durante la misa. La imagen elegida por el movimiento es la Refugium Peccatorum Madonna, del artista italiano Luigi Crosio (1898), que fue adquirida por las Hermanas de Schoenstatt en Suiza en 1964. Desde entonces es la Madre Tres Veces Admirable, a quien el sábado, sus hijos le dirán: “acepta que te proclamemos/ Reina del universo;/ enciéndenos en un ardiente amor por Ti,/ haz que inflamemos al mundo entero en tu servicio/ para que los pueblos/encuentren el camino seguro hacia la Patria.

SEMILLAS EN TIERRA FÉRTIL

FORMACION DE LAICOS.- El Movimiento se integra con grupos diferenciados de jóvenes, niños y familias que se preparan en el mundo para vivir su fe desde el trabajo o los estudios. Los más chicos se integran en el Camino de Formación a partir de la Primera Comunión. Conforman el grupo de los Apóstoles de María. Son alrededor de 250, actualmente. También está el grupo de adolescentes secundarios menores integrado por 180 chicos, y por los secundarios mayores, que son alrededor de 230. Los jóvenes universitarios, por su parte, son muchísimos más.

MISIONES FAMILIARES.- Todos los años se eligen distintos lugares para ir a misionar, generalmente los más olvidados. Los matrimonios llevan un grupo de niños, entre los cuales se encuentran sus hijos, y una imagen peregrina de la Virgen. “Es muy lindo ver la reacción de las personas cuando uno les lleva la imagen”, afirma Bernardo Méndez.

MISIONES DE INVIERNO Y DE VERANO.- Anualmente se realizan dos grandes misiones: una en el invierno y otra en el verano. Las misiones de verano se inician el 26 de diciembre durante 10 días. Los jóvenes pasan el Año Nuevo en las comunidades con la gente de los pueblos. Generalmente se acampa en escuelas. Los lugares pueden ser las poblaciones de El Timbó o La Cocha.

MARIA SOLIDARIA.-El movimiento cuenta con proyectos de ayuda social. Sostiene dos comedores infantiles, uno en el barrio Los Pocitos y otro en Pacará Pintado.

FORMACIÓN DE LÍDERES.- El grupo de Juventud que se Mueve (JQM) realiza un fuerte trabajo a nivel social y de formación de líderes.