Si se tratara de la construcción de una casa, se diría que sólo faltan detalles: la decoración y la pintura. En este caso, es la demarcación de la pista. La reapertura del aeropuerto Benjamín Matienzo ha sido confirmada por el Gobierno nacional, a través de los organismos que intervienen en el sistema aerocomercial e, inclusive, por los trabajadores que participaron en la reconstrucción de la pista de aviones. También se mejoró la plataforma comercial, donde estacionan las aeronaves; las calles de rodajes que conectan con la pista, y la instalación de un sistema de balizamiento. Todo esto se podrá notar desde el 1 de septiembre, cuando se reabra la aeroestación.

“Llevamos adelante una obra monumental para que el aeropuerto de Tucumán tenga la infraestructura que se merece. Esto va a permitir que el Benjamín Matienzo siga creciendo en cantidad de vuelos. Ese crecimiento no sólo incluye seguir sumando pasajeros, sino también seguir sumando vuelos de carga, gracias a todas las mejoras que estamos llevando adelante en la logística del transporte internacional de arándanos”, dijo a LA GACETA el ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, a una semana de la inauguración de las obras.


El funcionario explicó, además, que Tucumán volverá a ser un destino internacional con las nuevas rutas “que impulsamos desde el Gobierno nacional, en el marco de la Revolución de los Aviones”. “Queremos que el transporte y la conectividad sean realmente federales. Por eso, la apuesta a obras como ésta, fundamentales para el crecimiento de los tucumanos”, enfatizó Dietrich.


La terminal aérea se cerró el 1 de junio y desde ese día se llevaron adelante las obras, que demandarán una inversión total de $ 1.500 millones. Además de la reconstrucción de la pista y la reparación de la antigua plataforma comercial, que corresponden a la denominada “parte de aire”, está prevista un conjunto de trabajos para 2018, como la construcción del nuevo edificio terminal, la modernización de la torre de control y la ampliación del estacionamiento vehicular (la “parte de tierra”).

“El de Tucumán es uno de los aeropuertos que más inversión desarrollamos y la que está proyectada. El año pasado inauguramos la plataforma comercial para la producción de arándanos. Este año, las obras que hicimos son muy importantes, más que el año anterior por volumen de obras, que tiene que ver con la reconstrucción y ampliación de la pista”, dijo Patricio Di Stefano, presidente del Organismo Regulador del Sistema Nacional de Aeropuertos (Orsna), quien resaltó que la obra en la pista incluyó la extensión de 600 metros, pasará a tener 3.500 metros.


“Con la extensión, bajará mucho el costo en fletes, por lo cual el arándano será más competitivo a la hora de la exportación (comenzará el próximo mes). Por otro lado, la ampliación pone a Tucumán con características en la pista similares a las mejores de Argentina, como Ezeiza. Así, recibirá vuelos de cualquier aerolínea y cualquier tamaño de avión”, añadió el funcionario. A partir del segundo semestre de 2018 se prevé el inicio de los trabajos para renovar completamente la terminal de pasajeros, para lo cual se contrató al estudio de arquitectura de César Pelli.