La Asamblea Nacional Constituyente de Venezuela, dominada por los aliados del presidente Nicolás Maduro, asumió hoy las competencias del Parlamento, de mayoría opositora. Ocurrió luego de que su junta directiva no se presentara a supeditarse al cuerpo plenipotenciario.

Los miembros de la junta directiva del Congreso ya habían advertido anoche que no acudirían a la sesión de la asamblea constituyente por considerar que es "un poder de facto expresión de la naturaleza hegemónica que pretende perpetuar a Nicolás Maduro en el poder".

La constituyente ha sido criticada fuertemente no sólo por la oposición, sino por diversos gobiernos alrededor del mundo que le han pedido a Maduro que dé marcha atrás. Pero el mandatario la ha defendido, asegurando que es la única forma de pacificar el país, inmerso en una crisis política y económica.

"La Asamblea Nacional Constituyente en ejercicio de sus poderes (...) decreta asumir las competencias para legislar sobre las materias dirigidas directamente a garantizar la preservación de la paz, la seguridad, el sistema socioeconómico financiero", se lee en el decreto aprobado por unanimidad.

"Considerando que la junta directiva de la Asamblea Nacional fue convocada (...) y no asistió en franco desconocimiento de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela", agregó.

 En los últimos días, el resto de poderes públicos -incluido el propio Maduro- desfilaron por la asamblea constituyente para subordinarse a su plenipotenciario poder.